¿Qué hizo Giles o qué dejó de hacer Adrián”

Recientemente publicamos una encuesta que nos hicieron llegar con datos que parecían firmes en el mayor de los casos, aunque mostraba algunas anotaciones que nos parecieron distantes. Ahí, Jesús Giles estaba detrás de gente como el doctor Víctor Caballero Solano, el también senador Sergio Álvarez Mata y hasta el secretario de Finanzas, Alejandro Villalobos. Lo que tenemos a la vista lo separa de todos y empareja a Adrián.

Dirían los bromistas simples, cuando tienen dos respuestas, la buena y la mala.

La buena, en el caso del “Cuadrado Rivera” es que éste sigue arriba, punteando. La mala, es que a un solo punto del diputado Jesús Giles.

Enrique Bartning Díaz (QEPD)

Enrique Bartning Diaz, 71 años, aficionado a las motocicletas desde siempre, era gente de Cuernavaca reconocida y apreciada. Yerno de don José Luis Carvajal, ex suegro de Sergio Estrada Cajigal Ramírez, un buen hombre. Lo reconocíamos hace muchos años por un amigo mutuo, el muralista José Silverio Saiz Zorrilla, por cierto hombre querido por todos. Bartning sufrió un accidente que le costó la vida. A sus familiares un abrazo.

¿Y Jethro Ramsés?

¿Qué institución va a tomar la palabra en el caso de la desaparición del joven Jethro Ramsés Sánchez luego de mes y medio de su desaparición? Todos lo saben porque han escuchado comentarios de cientos que atestiguaron los hechos en la pasada edición de la Feria de Cuernavaca. Parece asunto de rutina, pero ninguna autoridad que NADA TIENE QUE VER se atreve a hablar. Lo veíamos y escuchábamos en el programa “QRR” de la televisión con Chucho Castillo y Federico Mayorga, lo que señalábamos líneas atrás, muchos asistentes ese día a la feria lo vieron, pero nadie quiere hablar. Sin embargo, tiene que existir alguna carpeta de investigación, un oficio, alguna declaración. Tiene que estar por ahí.

Según lo que se dice, un asunto de comisaría se transformó en una carga pesada sobre los hombros de los tres niveles de gobierno. La familia dejó de insistir, y los entendemos. Seguro hubo por ahí alguna recomendación para bajar el perfil. Pero Jethro no aparece y urge que lo presenten, vivo de preferencia.

Joaquín Hernández Galicia “La Quina”

Una tarde comíamos con el legendario dirigente petrolero Joaquín Hernández Galicia, mejor conocido como “La Quina”, en un restaurancito de un chef alemán en la calle paralela a Emiliano Zapata, por el norte de la ciudad. Nos lo presentó un viejo amigo ya fallecido, Julio Márquez de la Rosa, al que don Joaquín le prodigaba afecto. Con años liberado de aquella prisión de 1988 en los primeros días del Salinato, en un evento que el tamaulipeco considera “fue una cosa del sistema, una venganza del presidente Salinas, y la fraguaron como se hacen las cosas desde el poder máximo: con vísceras y a lo pendejo”. Líder siempre del sindicato de Pemex –al frente o detrás--, a don Joaquín le queda claro que era incómodo y lo iban a apresar.

“El cadáver de un agente del Ministerio Público federal que presuntamente maté o mató mi gente, fue sembrado en la puerta de mi casa en Ciudad Victoria; lo traían congelado desde Tijuana, donde verdaderamente lo asesinaron; hasta echaba hielitos”, decía enfático pero imprimiéndole su estilo irónico. Nos volvimos a sentar, varias ocasiones, a platicar en el Sanborn’s de Plaza Cuernavaca. Hombre menudo físicamente, pero temido durante décadas. Era poderoso. Cuando le pasó “lo que le pasó”, entendió las reglas del sistema y se dedicó a vivir.

Viene a colación por el Asunto Jorge Hank Rhon, al que lo acusan de algo que siempre ha tenido, desde niño, un montón de armas y, parece, que siempre con permiso oficial. Ni hablar, es la guerra política, la que dictan los hombres del poder que, cuidado, y lo hagan desesperados. Pueden generar un caos. La cosa es que la gente haga lo que hace, que camine derechito y no de pie a lo que no parece, es una “cacería de brujas” en su principio.