En México, es difícil tomar la decisión ya que estamos acostumbrados a tener a nuestro familiar con nosotros, en casa, y decimos que lo cuidamos a pesar de que todos salimos a trabajar y lo dejamos solo, bueno, con la televisión encendida todo el día.
¿Cuáles serán los aspectos más importantes que deberemos evaluar en cada una de las instituciones que visitemos? ¿Qué características deberá tener la residencia?
En Morelos, se está trabajando en un directorio de los albergues, asilos y residencias geriátricas para que las personas conozcan los diferentes lugares y las diferentes propuestas de servicio que existen.
Sin embargo, hay puntos muy importantes que se deben tomar en cuenta al llevar a nuestro ser querido, ya que será su penúltima morada y debe ser, por supuesto, un lugar que le proporcione bienestar y una excelente calidad de vida.
Esto se puede lograr observando que las instalaciones sean las adecuadas: un punto importante y que las personas deben exigir al llegar a un centro geriátrico es preguntar si tienen licencia de funcionamiento por parte de la Secretaría de Salud. Esta licencia no tiene ningún costo, pero muchos lugares abren sin tener este requisito que es indispensable para brindar respaldo y seguridad tanto a los familiares como a la persona que se internará en el geriátrico.
Ahora bien, en cuanto a las instalaciones en general, el espacio puede estar en uno, dos o hasta tres niveles, ver que se cuente con piso antiderrapante, que se tengan elevadores o rampas de acceso, una muy buena iluminación al igual que la ventilación.
Si se cuenta con jardín, esto puede ayudar a que el paisaje sea más agradable aún. Que cuente con un estado adecuado de higiene es imprescindible, al igual que se tenga suficiente personal, especialmente lo que se refiere a médicos geriatras, enfermeras, auxiliares de enfermeras, cuidadoras y personal que tenga experiencia en el trato a personas adultas mayores, es decir, un equipo de atención interdisciplinaria.
Hoy en día, las personas buscan centros de día o clubes de día, donde las personas que asisten por un período corto de tiempo puedan interactuar con las personas que viven en el mismo, y así compartir experiencias, clases, talleres, pláticas, etc.
También es igual de importante que en los centros geriátricos se permita hacer servicio social o que universidades y escuelas participen en realizar prácticas, para que se rompa esa barrera intergeneracional que ahora está tan marcada.
Los centros geriátricos deben contar con profesionistas en la materia, es decir, que tengan una importante trayectoria profesional comprobable para que tengamos la absoluta certeza de que nuestro familiar estará atendido de la forma correcta.
Todas las instituciones deben contar, al ingresar a su familiar, con un contrato de prestación de servicios y con su propio reglamento interno, para que las personas no se sientan sorprendidas por algo que ellas desconozcan y no se les haya informado desde el principio que se contrató el servicio.
Todos estos puntos son de gran importancia ya que se trata de nuestro familiar, de un ser querido a quien queremos que traten mejor que en su casa, que esté atendido en todos los aspectos y necesitamos saber que es la institución adecuada para que viva nuestro familiar.
La Secretaría de Salud verifica constantemente los diferentes espacios que existen para personas adultas mayores y exige que se cumpla con una serie de requisitos sanitarios y lleva un control de los mismos, conjuntamente con la Red de Personas Adultas Mayores que tiene también como objetivo supervisar dichos lugares y que cumplan con los ofrecimientos que ellos tienen, además de ser obligatorio estar incorporado al Directorio Nacional de Instituciones de Asistencia Social.
Invitamos a todas las personas a nuestra siguiente reunión de la Red de Personas Adultas Mayores el próximo martes 22 de febrero, a las 10:30 hrs. en el auditorio de las oficinas de la Comisión de Derechos Humanos, de la calle de Galeana y Rufino Tamayo, en la colonia Acapantzingo.