Sin embargo, el acuerdo deberá ser comunicado al Consejo Estatal Electoral al menos cinco días antes de cualquier proceso de selección de candidatos o precampañas. Asimismo, se deberá comunicar a la autoridad electoral el retiro de la precampaña de alguno de los precandidatos y modificaciones o resoluciones de cualquier tipo a la convocatoria respectiva.
El artículo 198 señala que los procesos de selección interna de candidatos a los cargos de gobernador, diputados al Congreso del Estado y miembros de los ayuntamientos se llevarán a cabo en el mismo año en que se realice la elección correspondiente. Durarán como máximo hasta dos terceras partes del tiempo de campaña respectivo, y no podrán extenderse más allá del día 20 de marzo del año de la elección. Las precampañas de todos los partidos políticos se celebrarán de conformidad con la convocatoria respectiva que emita el partido; en todo caso deberán respetar los plazos establecidos en el presente código.
¿Cuánto tiempo de duración marca el CEE para la campaña electoral de gobernador? Exactamente 75 días, mientras que para diputados al Congreso local y los 33 ayuntamientos las campañas durarán 60 días. El artículo 220 del Código indica que se iniciarán de conformidad con el calendario aprobado por el Consejo Estatal Electoral para cada proceso electoral. Y durante los tres días anteriores a la jornada electoral no se permitirá la celebración de actos de campaña. Así las cosas, entre el 1 y el 20 de marzo del año próximo se llevarán a cabo los procesos internos (precampañas) de todos los partidos políticos para elegir a sus candidatos a la gubernatura, a diputados locales y a presidentes municipales (incluidas las fórmulas para síndicos y regidores). Como pueden ustedes apreciar, amables lectores, los tiempos de máxima ebullición dentro de dichos institutos políticos están cada día más cerca.
Tras las decisiones internas de los partidos, el registro de los candidatos respectivos, según plasma el Código Estatal Electoral en el artículo 207, se hará de la manera siguiente: para el caso del candidato a gobernador de Morelos ante el Consejo Estatal Electoral entre el 1 y el 7 de abril de 2012. Y el citado Consejo tendrá cuatro días para resolver sobre la procedencia del registro. En tanto para el registro de candidatos a diputados y ayuntamientos el proceso se hará del 8 al 15 de abril. El mismo artículo mandata que los partidos políticos deberán registrar ante el Consejo Estatal Electoral, del 1 al 7 de abril del año de la elección, la plataforma electoral que sus candidatos sostendrán durante las campañas políticas.
El artículo 188 del CEE indica que el proceso electoral ordinario se inicia seis meses antes del mes que corresponda al día de la elección y concluye con los cómputos y las declaraciones que realicen los Consejos Electorales o las resoluciones que, en su caso, emita en última instancia el órgano jurisdiccional correspondiente. La fecha de arranque, pues, será el primero de enero de 2012. Las campañas preelectorales para todos los cargos en disputa, por lo tanto, comenzarán alrededor del 16 de abril y deberán concluir una semana antes del primero de julio, cuando se desarrollarán los comicios concurrentes, en que los morelenses elegiremos al nuevo presidente de la República, al futuro gobernador de Morelos, a cinco diputados federales, a 18 legisladores de mayoría relativa y 12 de representación proporcional, a 33 presidentes municipales, a un número igual de síndicos y a un montón de regidores locales. La feria del hueso en su máximo esplendor.
Seis meses, desde ahora hasta marzo de 2012 (cuando ya habrá candidatos a todos los cargos de elección popular, federales, estatales y locales) se pasarán demasiado rápido, estimados lectores, considerando los siguientes tiempos y movimientos políticos a partir de lo que resta de septiembre. Una vez concluidas las fiestas patrias, el Congreso local y el Poder Ejecutivo se dedicarán a analizar el Presupuesto de Egresos 2012. El respectivo forcejeo se llevará a cabo dentro de un dinamismo marcado por la misma ebullición preelectoral. En octubre se realizará un simulacro del proceso de entrega-recepción, en el gobierno estatal, a fin de preparar las cosas rumbo a la transmisión de poderes el primero de octubre de 2012. Noviembre será un mes para preparar el cierre fiscal, también por parte del Ejecutivo y desde luego los 33 ayuntamientos. ¡Vaya que habrá forcejeo por la disputa de recursos! Ese mes tiene varias celebraciones y puentes. Diciembre será de festividades y vacaciones. En el ínterin pedirán licencia varios legisladores federales y locales que aspiran a otros cargos de elección, al igual que tendrá que hacerlo una pléyade de funcionarios públicos. Arribarán a Morelos enviados especiales de los comités ejecutivos nacionales de los principales partidos. Y así concluirá el año. El domingo primero de enero arrancará el periodo electoral constitucional. Al comenzar el año nuevo, el gobernador Marco Adame Castillo empezará a redactar su quinto informe, lo cual llamará la atención de propios y extraños, así como la entrega del documento al Congreso en febrero próximo. El tiempo transcurrirá más rápido de lo que ustedes imaginan.
Mientras tanto, los adeptos a tal o cual candidato se frotan las manos, aunque muchos, muchísimos están bastante nerviosos debido a su ansia por incrustarse o mantenerse en la ubre gubernamental. Sin embargo, rumbo a “la madre de todas las elecciones” nadie puede estar seguro. Hay quienes ya se montaron en la cresta de una ola triunfalista, demasiado prematuramente, ignorando que la política y las designaciones de candidatos surgen, la mayor parte del tiempo, bajo las condiciones del momento. Aguas con la frustración, señores “políticos”.