Luego de una serie de exhaustivos análisis, dos equipos diferentes determinaron que hay dos lugares en la Tierra donde cualquier tipo de vida simplemente no podría existir. El hallazgo de estos dos lugares sin vida en la Tierra, ni siquiera de vida microbiana, plantea nuevos desafíos para la búsqueda de lugares habitables en el resto del cosmos.
La Antártida, la primera región sin vida en la Tierra
Antes de estos estudios, se creía que no había ninguna condición natural que impidiese la formación de vida microbiana en el planeta Tierra. Sin embargo, dos lugares extremos en la Tierra han demostrado ser regiones sin vida.
El primero de estos lugares es un sitio extremadamente frío, se trata del glaciar Shackleton, en la Antártida. En este lugar, un grupo de científicos de la Universidad de Colorado, en Boulder, Estados Unidos, analizó muestras de suelos muy fríos, secos y con la presencia de sales tóxicas.
Según los investigadores, la presencia en conjunto de estos tres factores limita por completo las posibilidades de que la vida prospere, y así lo determinaron con las pruebas, donde no se identificó ninguna actividad biológica en más más de 200 muestras de suelo tomadas en el glaciar.
“Siempre se ha supuesto que los microbios son resistentes, que pueden vivir en cualquier parte”, indicó Noah Fierer, líder del equipo que publicó sus resultados en mayo en la revista JGR Biogeosciences. Pero este sitio no es el único donde los análisis determinaron que se encuentra sin vida alguna.
Desierto de Danakil el segundo de los lugares sin vida
El desierto de Danakil fue analizado en 2019 por un equipo franco-español de científicos. En este lugar hay un complejo geotérmico, uno de los entornos más peligrosos e inhóspitos de nuestro planeta.
Allí, los científicos concluyeron que es el segundo de los lugares sin vida, luego de analizar gran cantidad de muestras en cuatro zonas diferentes del complejo geotérmico entre 2016 y 2018.
Esta región cuenta con piscinas saladas, calientes e hiperácidas, con alto nivel de magnesio, que es capaz de destruir cualquier tipo de formación celular, además de hiperacidez e hipersalinidad, donde la vida microbiana no puede darse.
Estos dos estudios sobre los lugares sin vida de la Tierra, han generado nuevas preguntas para los astrofísicos que buscan nuevas formas de vida en otros planetas.
Estas dos pruebas refutan la idea de que la mera presencia de agua líquida en un planeta, que suele utilizarse como criterio de habitabilidad, es el primer indicio de vida.
Los estudios en la Antártida también sirven para definir la posible formación de vida en Marte, ya que la característica de la roca es muy similar: suelos congelados, saturados de sales tóxicas y no han albergado cantidades considerables de agua líquida durante al menos dos millones de años.
Por ahora los científicos han pedido precaución a la hora de informar sobre esta noticia, ya que esperan nuevos resultados, pero las primeras pruebas sobre los dos lugares sin vida de la Tierra, parecen contundentes y redefinirían la búsqueda de vida en el futuro.