SpaceX ha finalizado la producción de nuevas cápsulas Crew Dragon para limitar así la flota a cuatro de estas naves y acelerar el desarrollo del eventual sucesor de la cápsula, el Starship, cuyo lanzamiento inaugural se ha retrasado vasiros meses por revisiones regulatorias y problemas en el motor.
"Estamos terminando nuestra (cápsula) final, pero todavía estamos fabricando componentes, porque estaremos reacondicionando", dijo la presidenta de SpaceX, Gwynne Shotwell.
La empresaria añadió que SpaceX seguirá con la capacidad de construir más cápsulas si surge alguna necesidad en el futuro, indica RT.
Crew Dragon ha puesto en órbita a cinco tripulaciones gubernamentales y privadas desde 2020 a la fecha, cuando llevó a sus primeros astronautas de la NASA y se convirtió en la principal nave de la agencia espacial de Estados Unicdos para trasladar humanos a la Estación Espacial Internacional y desde ella de vuelta a la Tierra.
Tiene su base en el carácter reutilizable de las naves, que son arregladas después de cada vuelo en instalaciones de SpaceX locaizadas en Florida.
"Hay problemas del ciclo de vida, donde una vez que comienzas a usarlo por tercera, cuarta o quinta vez, comienzas a encontrar cosas diferentes", dijo el astronauta retirado de la NASA Garrett Reisman. "SpaceX es realmente bueno para identificar estos problemas enseguida y luego actuar rápidamente para solucionarlos".
En el 2021, la compañía realizó una misión en Crew Dragon totalmente ajena a su contrato con la NASA, y planea al menos otras cuatro misiones privadas más de astronautas en estas cápsulas en colaboración con el constructor de estaciones espaciales Axiom Space.
Según señala Reisman, el propósito central de SpaceX es que sus naves reutilizables hagan varios vuelos al espacio sin necesidad de un gran proceso de mantenimiento después de cada vuelo y solo mediante el reabastecimiento de gas y oxígeno, lo que les permitiría "funcionar rápidamente".