Elon Musk y la NASA no son los únicos que realizan misiones en el espacio. China tiene su propia agenda de trabajo: envió robots a la Luna, los aterrizó en Marte y ahora observan sistemas solares en búsqueda de la Tierra 2.0.
Próximamente las y los científicos publicarán el itinerario para descubrir exoplanetas, astros fuera del sistema solar. La nueva misión de la nación asiática tiene como objetivo encontrar un primer planeta que sea muy similar a la Tierra y que orbité cerca del sol.
Científicos chinos han bautizado al próximo astro como Tierra 2.0 y piensan que debe existir agua y las condiciones adecuadas para que haya vida.
Según la revista Nature, ya se han descubierto más de 5 mil planetas fuera de la Vía Láctea. La mayoría se han ubicado con ayuda del telescopio Kleper, de la NASA.
‘‘Con la tecnología y los telescopios actuales, es extremadamente difícil encontrar la señal de pequeños planetas similares a la Tierra cuando sus estrellas anfitrionas son un millón de veces más pesadas y mil millones de veces más brillantes’', dijo Jessie Christiansen, astrofísica del Instituto de Ciencias de Exoplanetas de la NASA en California.
La misión china, llamada Tierra 2.0, espera cambiar eso. Será financiado por la Academia de Ciencias de China y está finalizando su fase inicial de diseño. Si los diseños pasan la revisión de un panel de expertos en junio, el equipo de la misión recibirá fondos para comenzar a construir el satélite. El equipo planea lanzar la nave espacial en un cohete Gran Marcha antes de finales de 2026.
Los telescopios buscarán exoplanetas detectando pequeños cambios en el brillo de una estrella que indiquen que un planeta ha pasado por delante de ella.
El uso de múltiples telescopios pequeños juntos brinda a los científicos un campo de visión más amplio que un solo telescopio grande como el Kepler.
Los seis telescopios de Tierra 2.0 mirarán juntos alrededor de 1.2 millones de estrellas a través de un parche de cielo de 500 grados cuadrados, que es aproximadamente cinco veces más ancho que la vista de Kepler. .
“Nuestro satélite puede ser de 10 a 15 veces más poderoso que el telescopio Kepler de la NASA en su capacidad de estudio del cielo”.
El séptimo instrumento del satélite será un telescopio de microlente gravitacional para inspeccionar planetas rebeldes (objetos celestes que deambulan libremente y no orbitan ninguna estrella) y exoplanetas que están lejos de su estrella similar a Neptuno.
Detectará cambios en la luz de las estrellas cuando la gravedad de un planeta o una estrella distorsione la luz de una estrella de fondo por la que pasa. El telescopio apuntará al centro de la Vía Láctea, donde se encuentra un gran número de estrellas.
Si se lanza con éxito, este sería el primer telescopio de microlente gravitacional que opera desde el espacio.