La última Luna llena del año será visible a partir de la madrugada de este jueves 8 de diciembre para México y Norteamérica. A este evento se le conoce como “Luna de hielo” gracias a que marca el inicio de las noches más largas y frías que trae la temporada invernal al hemisferio norte de la Tierra.
El avistamiento de la Luna llena será de 15 horas con 33 minutos, y significará el periodo más largo del año para ver al satélite natural, según informó la NASA.
Entre el 8 y el 29 de diciembre el satélite pasará por distintas etapas en las que el perderá visibilidad, y será el 24 de diciembre que llegue a Luna nueva, por lo que será poco visible desde la Tierra.
¿Qué pasa en una Luna llena?
Cuando la Luna está en el lado opuesto de la Tierra al Sol, luce completamente iluminada desde nuestro planeta, por lo que se considera ‘llena’, según explica la organización Nine Planets.
Caso contrario es en la Luna nueva, cuando la Tierra interfiere en la iluminación del Sol sobre el satélite, por lo que luce oscura y es poco visible.
Luna de hielo el 8 de diciembre 2022: ¿Cómo y cuándo ver este fenómeno?
De acuerdo con el Instituto Nacional de Astrofísica (Inaoe), la Luna de hielo será visible en México a las 4:08 horas, tiempo de la capital del país.
El fenómeno se extenderá a lo largo del día, y mientras ocurre, la Luna tendrá una conjunción con Marte, por lo que el satélite natural ocultará al planeta de la vista de la tierra durante alrededor de dos horas y media.
Para ver la Luna de hielo no necesitarás de telescopio ni binoculares; sin embargo, para la conjunción con Marte sí.
Si quieres ver los fenómenos desde la comodidad de tu casa puedes hacerlo en la página web de la NASA dedicada al monitoreo de la Luna.
Luna de hielo: ¿Por qué se llama así?
La última Luna llena del año normalmente ocurre en una etapa en la que el satélite se encuentra en su punto más lejano con la Tierra, por lo que no se verá muy grande a comparación de las que ocurren en el resto del año.
CNN explica que se le conoce como Luna de hielo debido a que su aparición coincide con que las noches en el hemisferio norte son cada vez más largas y frías previo a la llegada del invierno.