Un componente clave del vehículo Dragonfly de 8 rotores que se lanzará en 2027 rumbo a Titán ya ha sido sometido a pruebas en el Túnel Dinámico Transónico (TDT) del Centro Langley de la NASA.
Dragonfly, similar a un dron, atravesará la densa atmósfera rica en nitrógeno de la mayor luna de Saturno para aterrizar, tomar muestras y examinar diversos lugares.
El vehículo tendrá cuatro pares de rotores, cada uno con dos rotores en configuración coaxial, es decir, un rotor encima del otro.
Es similar a un dron terrestre típico, pero bastante más grande, ya que el vehículo mide más de 3.5 metros de punta a cola y, en los puntos más anchos, de punta a punta del rotor.
Pruebas de los rotores
Los investigadores de Langley y del Laboratorio de Física Aplicada Johns Hopkins (APL) realizaron una serie de pruebas con un par coaxial de rotores en el TDT destinadas a validar modelos informáticos.
La gran sección de pruebas permitió utilizar equipos representativos de vuelos a escala real, y la posibilidad de llenar el túnel con gas pesado permitió probar los equipos con cargas aerodinámicas representativas de Titán.
Los investigadores simularon las condiciones previstas de vuelo estacionario, descenso y ascenso, y evaluaron las cargas aerodinámicas de cada rotor con distintas velocidades del viento, ángulos del eje del rotor y ajustes del acelerador del rotor.
Los investigadores también realizaron pruebas con un rotor en funcionamiento y el otro parado para evaluar los modos de fallo.
Los sensores y acelerómetros del artículo de prueba midieron las cargas y aceleraciones creadas por cada rotor a distintas velocidades del viento, orientaciones y velocidades del rotor.
El análisis preliminar de los datos indica que las predicciones del CFD sobre el rendimiento del rotor y los requisitos de potencia son válidas y que predicciones similares para el funcionamiento en Titán están dentro de las tolerancias previstas para la misión.
“Las pruebas realizadas en esta instalación única en su género fueron un primer paso crucial para llevar a buen puerto esta apasionante misión”, declaró en un comunicado Richard Heisler, jefe de pruebas del túnel de viento para Dragonfly en APL, que está diseñando y construyendo el helicóptero y gestiona la misión para la NASA.
Asimismo, comentó que los datos que recogieron en el TDT les dará una imagen mucho más clara de cómo se podría esperar que se comporten los rotores de Dragonfly en la atmósfera extraterrestre de Titán.
Dragonfly está programado para lanzarse en 2027 y llegar a Titán en 2034, cuando comenzará lo que se espera que sea una misión de tres años para explorar y arrojar luz sobre la compleja química en el exótico mundo lunar y oceánico.