Arqueólogos del Centro de Arqueología Mediterránea de la Universidad de Varsovia, descubren dos tumbas en la necrópolis del Asasif, donde estaban enterrados principalmente altos funcionarios egipcios de las dinastías XVIII, XXV y XXVI. Estas tumbas guardaban los cráneos de nueve cocodrilos, animales que abundaban en las aguas del río Nilo, el cuerpo de agua más importante de Egipto.
Las cabezas de cocodrilo no estaban propiamente momificadas, sino solo envueltas en telas. Aparte de los cráneos, también se hallaron los dientes y algunos trozos de mandíbula de los reptiles.
Los descubrimientos se reportaron en el Journal of African Archaeology junto con fotografías y datos completos acerca de la investigación.
Patryk Chudzik, uno de los investigadores que participó en el hallazgo y en la redacción del estudio, afirma que se trata de un “descubrimiento único”, pues pocas veces se da la oportunidad de realizar un descubrimiento de esta magnitud.
De acuerdo al estudio, los cráneos de cocodrilos encontrados pertenecen a la especie Crocodylus niloticus, una de las cuatro especies de cocodrilos que habitan en África.
Mientras tanto, se cree que las tumbas pertenecen a un noble llamado Cheti, un importante funcionario durante el reinado del faraón Mentuhotep II (2009-1959 a.C.), y la segunda a un visir que sirvió en la corte del mismo faraón.
Estas tumbas se encuentran cerca del templo de Hatshepsut, en la necrópolis de Asasif. Son objeto de investigación por parte de arqueólogos polacos desde 2013.
¿Por qué las tumbas contenían cocodrilos en su interior?
Según la mitología del antiguo Egipto, el Dios Sobek era representado por un hombre con cabeza de cocodrilo. Esta deidad era el Dios de la fertilidad, la vegetación y la potencia creadora, a la vez que una divinidad protectora.
Los antiguos egipcios asociaron a Sobek con los dioses Amón, Re (como Sobek-Re), Horus, Herishef e incluso Seth.
De acuerdo con Patryk Chudzik, él comenta lo siguiente:
"El alma del difunto cuya tumba contenía cabezas de cocodrilo estaba protegida por Sobek y la forma combinada de Sobek-Re. De esta manera podría tomar la forma de un dios y así adquirir sus poderes para estar protegido frente a los peligros que acechaban en el más allá”.