Una red de telescopios logra fotografiar la materia que emana del centro supermasivo de la galaxia Messier 87, a 55 millones de años luz.
Es la primera vez que se observa en directo el potente chorro de materia expulsado desde un agujero negro supermasivo. Este fenómeno cósmico inédito ocurrió en el centro de la galaxia Messier 87 (M87), ubicada a 55 millones de años luz de distancia en nuestro vecindario galáctico, y fue captado en 2018. Este agujero negro logró fama mundial al convertirse en el primero que se fotografiaba.
La mayoría de las galaxias albergan un agujero negro supermasivo en su centro, que aunque son conocidos por engullirlo todo, también pueden lanzar poderosos chorros de materia que se extienden más allá de su vecindario galáctico. Esta nueva captura de la galaxia M87 ha podido reproducirse gracias a la colaboración de un conjunto de 14 radiotelescopios situados por toda la superficie terrestre. Este mismo grupo también logró captar el agujero negro Sagitarius A* que habita en el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea.
La comunidad astronómica informa de que este proyecto científico internacional, desarrollado para captar estos titánicos fenómenos galácticos, ayuda a que se comprenda mejor cómo estos misteriosos gargantúas pueden lanzar chorros tan energéticos. Una incógnita astronómica, según explica en una nota Ru-Sen Lu, del Observatorio Astronómico de Shanghái, en China: “Todavía no entendemos del todo cómo sucede, pero sabemos que los chorros son expulsados de la región que rodea a los agujeros negros”. Para poder estudiarlo directamente, los científicos necesitaban analizar el fenómeno con mucho más detalle que hasta ahora.
(El texto fue tomado de una publicación del 26 de abril de 2023 de el periódico español El País)