Uno de los CubeSat lanzados por la NASA en la misión Artemis I a la órbita lunar no ha podido alcanzar su objetivo de situarse sobre el polo sur del satélite para ayudar a buscar hielo.
Lunar Flashlight se lanzó el 11 de diciembre de 2022 para demostrar varias tecnologías nuevas, con el objetivo final de buscar hielo superficial en los cráteres permanentemente sombreados del Polo Sur de la Luna.
Desde entonces, el sistema de propulsión miniaturizado del satélite del tamaño de un maletín, el primero de su tipo jamás volado, demostró ser incapaz de generar suficiente empuje para entrar en órbita lunar, a pesar de los meses de esfuerzo del equipo de operaciones. Debido a que el CubeSat no puede completar las maniobras para permanecer en el sistema Tierra-Luna, la NASA ha puesto fin a la misión.
Si bien el CubeSat no pudo llegar al Polo Sur lunar para ayudar a buscar hielo, cumplió varios objetivos tecnológicos. Usado por primera vez más allá de la órbita de la Tierra, el sistema de propulsión y el combustible verde de Lunar Flashlight fueron tales demostraciones. Aunque el sistema de propulsión no pudo producir el empuje deseado, probablemente debido a la acumulación de desechos en las líneas de combustible del propulsor, los componentes del sistema de propulsión recientemente desarrollados superaron las expectativas de rendimiento, informa la NASA.
También superaron las expectativas la computadora de vuelo Sphinx --nunca antes volada-- de Lunar Flashlight, una computadora de bajo consumo desarrollada por el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en el sur de California para soportar la radiación del espacio profundo, y la radio Iris mejorada de la nave espacial. Con una nueva capacidad de navegación de precisión, la radio puede ser utilizada por futuras naves espaciales pequeñas para encontrarse y aterrizar en cuerpos del sistema solar.