La misión espacial de la India, Chandrayaan-3, ha dejado a la comunidad científica mundial asombrada con sus recientes hallazgos en la Luna.
La Organización de Investigación Espacial de la India (ISRO) ha anunciado la detección de datos sísmicos lunares, marcando la primera vez que se registran tales eventos desde la década de 1970.
Los datos sísmicos fueron capturados por el Instrumento para la Actividad Sísmica Lunar (ILSA), que se encuentra a bordo del módulo de aterrizaje Vikram. Este instrumento de vanguardia, basado en tecnología de Sistemas Micro Electro Mecánicos (MEMS), logró registrar las vibraciones sísmicas generadas por el rover Prayan mientras se desplazaba por la superficie lunar.
El principal objetivo de ILSA es medir y analizar las vibraciones del suelo causadas por terremotos naturales, impactos de meteoritos y otros eventos tanto naturales como artificiales.
Chandrayaan-3 Mission:
— ISRO (@isro) August 31, 2023
In-situ Scientific Experiments
Radio Anatomy of Moon Bound Hypersensitive Ionosphere and Atmosphere - Langmuir Probe (RAMBHA-LP) payload onboard Chandrayaan-3 Lander has made first-ever measurements of the near-surface Lunar plasma environment over the… pic.twitter.com/n8ifIEr83h
Los gráficos compartidos por la ISRO muestran claramente las vibraciones producidas por el rover el 25 de agosto. Además, sorprendentemente, se ha identificado un evento natural el 26 de agosto, que está bajo rigurosa investigación para determinar si se trata de un terremoto lunar o un impacto de algún objeto desconocido, posiblemente en un lago cercano.
La investigación sobre este evento lunar único se encuentra en sus primeras etapas y se espera que tome alrededor de 14 días más para obtener resultados concluyentes. Actualmente, tanto el módulo de aterrizaje como el rover se encuentran en estado de suspensión en la región del polo sur lunar, lo que ofrece una ubicación estratégica para llevar a cabo estudios sísmicos detallados.
Este emocionante avance representa un logro en la exploración lunar y un retorno a la investigación sísmica lunar, que había sido una parte esencial de las misiones Apolo en las décadas de 1960 y 1970.