Un equipo internacional de científicos ha desenterrado nuevos fósiles de Dinocephalosaurus orientalis, el legendario 'dragón chino' acuático que habitó los mares del Triásico hace 240 millones de años.
Este reptil de cinco metros de longitud presenta un cuello extraordinariamente largo, compara con el también peculiar Tanystropheus hydroides, otro reptil marino del Triásico Medio presente tanto en Europa como en China.
Ambos reptiles comparten similitudes en su tamaño y características craneales, incluyendo una dentición tipo trampa para peces. No obstante, Dinocephalosaurus se destaca por poseer un mayor número de vértebras tanto en el cuello como en el torso, otorgándole una apariencia más semejante a la de una serpiente o a los míticos 'dragones chinos'.
Los fósiles, descubiertos en la provincia de Guizhou, en el sur de China, revelan que este reptil marino estaba perfectamente adaptado a la vida oceánica, como indican sus extremidades con aletas y los peces excepcionalmente conservados en su estómago.
Representación de Dinocephalosaurus orientalis creada por Marlene Donelly. | Foto: X @NatSciNMS.
A pesar de las semejanzas superficiales, Dinocephalosaurus no guarda relación cercana con los famosos plesiosaurios de cuello largo que surgieron unos 40 millones de años después y que inspiraron el mito del monstruo del Lago Ness.
El Dr. Nick Fraser, conservador de Ciencias Naturales de los Museos Nacionales de Escocia, comentó: “Este descubrimiento nos permite ver en su totalidad a este notable animal de cuello largo por primera vez. Es un ejemplo más del extraño y maravilloso mundo del Triásico que sigue desconcertando a los paleontólogos”.
El reptil, originalmente identificado en 2003, ha revelado sus secretos gracias al descubrimiento de nuevos especímenes, incluyendo uno completamente articulado, permitiendo a los científicos representar por primera vez en su totalidad a esta criatura única de cuello largo.
Durante una década, investigadores de Escocia, Alemania, Estados Unidos y China han estudiado detalladamente los fósiles en el Instituto de Paleontología y Paleoantropología de Vertebrados de Pekín, parte de la Academia de Ciencias de China.
La fascinante investigación, que arroja luz sobre este peculiar habitante del Triásico, se encuentra detallada en su totalidad en el último volumen de la revista académica Earth and Environmental Science: Transactions of the Royal Society of Edinburgh.