Treinta y tres ranas de Darwin en peligro de extinción han nacido en el Zoológico de Londres, marcando un avance en los esfuerzos de conservación de la especie.
Estos anfibios, nombrados en honor a Charles Darwin, viajaron desde los bosques del sur de Chile hasta la capital británica en un complejo operativo de rescate.
La población de ranas de Darwin ha disminuido drásticamente en los últimos años debido al hongo quitridio, una enfermedad letal que en 2023 redujo su presencia en el Parque Tantauco en un 90%.
Ante esta crisis, un equipo de conservacionistas emprendió una expedición en octubre para encontrar ejemplares sanos.
Lograron reunir 52 ranas, que fueron transportadas en cajas con temperatura controlada durante un trayecto de más de 11.000 kilómetros hasta Londres.
Lo más sorprendente del rescate fue la forma en que 33 renacuajos fueron trasladados: dentro de los sacos vocales de sus padres. Esta estrategia reproductiva única permite que los machos protejan y críen a los renacuajos hasta su desarrollo completo.
Ben Tapley, curador de anfibios del Zoológico de Londres, destacó la urgencia de la misión y calificó el nacimiento de las ranas como un "símbolo de esperanza".
Actualmente, los anfibios se encuentran en tanques que replican su hábitat natural, mientras se establece un programa de cría con el objetivo de reintroducir futuras generaciones en su entorno natural.
El investigador Andrés Valenzuela-Sánchez, de la Sociedad Zoológica de Londres (ZSL), subrayó la importancia del proyecto, no solo para la preservación de la especie, sino también para el estudio del hongo quitridio y la protección de otros anfibios en el mundo.