El famoso actor Kevin Spacey resulta absuelto en un tribunal de Londres después de ser acusado de agresión sexual. Un giro esperanzador para la carrera del actor o ¿un golpe a la confianza en la justicia?
El 26 de julio, en un desenlace sorprendente en un tribunal de Southwark, Londres, el reconocido actor Kevin Spacey fue declarado no culpable en nueve cargos de agresión sexual. Dichos actos habrían sido cometidos contra cuatro hombres en el periodo de 2001 a 2013. Tras 12 horas y 26 minutos de deliberación, el jurado liberó a Spacey de los cargos, desencadenando emociones fuertes para el actor, que estaba visiblemente conmovido por la noticia.
Es importante subrayar que, durante parte del periodo en el que se realizaron las supuestas agresiones, Spacey ostentaba el cargo de director artístico en el icónico teatro Old Vic de la capital británica. Fue allí donde algunos de los actos presuntamente tuvieron lugar.
Spacey, famoso por su interpretación en "American Beauty", fue absuelto de siete cargos, incluyendo el de obligar a una persona a participar en actividades sexuales sin su consentimiento y otro de participar en sexo con penetración sin consentimiento.
En la corte, los acusadores describieron a Spacey como un "acosador", a lo que él respondió alegando que las acusaciones eran "una puñalada por la espalda" y "una locura". Se alegó que Spacey tocó a los hombres sin permiso y habría utilizado estupefacientes con uno de sus colegas.
Sin embargo, la defensa de Spacey argumentó que no era un delito ser "promiscuo" o desear pasar un buen rato con hombres más jóvenes. El propio Spacey llegó a autodenominarse como "un gran ligón". A pesar de las afirmaciones de las supuestas "víctimas" de que no buscaban notoriedad ni beneficio financiero, el jurado se inclinó en favor del actor.
Este no es el primer caso que Spacey enfrenta. Hace un año, un jurado de Nueva York también lo declaró no responsable de una agresión similar. El actor Anthony Rapp acusó a Spacey de haberse comportado de manera inapropiada con él en una fiesta en 1986.
Es esencial recordar que las acusaciones contra Spacey surgieron en el marco del movimiento "MeToo", que cobró fuerza en 2017. De haberse encontrado culpable, Spacey podría haber enfrentado hasta 63 años de prisión.
Tras ser declarado inocente, el actor afirmó tener "mucho que procesar" y agradeció al jurado y a su equipo legal. "Me siento honrado por este resultado", declaró a las puertas del tribunal.
En un juicio anterior, Spacey había negado que su supuesto movimiento "característico" fuera tocar a los hombres por la entrepierna. Durante un intercambio acalorado, respondió a las acusaciones con un rotundo "¡Tonterías!". El actor sostuvo que nunca había agredido sexualmente a tres de los cuatro acusadores. Respecto a las acusaciones del cuarto hombre, admitió haberlo tocado por la entrepierna, calificándolo como un "tropiezo" durante una noche de copas.
Este desenlace deja muchas interrogantes en el aire, poniendo a prueba la confianza en los sistemas legales y la percepción pública de los famosos. El caso de Spacey, sin duda, seguirá dando de qué hablar en los años por venir.