Josh Hartnett, quien fue una de las estrellas más prometedoras de Hollywood a finales de los años noventa y principios de los 2000, ha vuelto al cine tras un prolongado distanciamiento de la industria. Con su participación en el reciente éxito Oppenheimer y su papel protagónico en el thriller psicológico La trampa, bajo la dirección de M. Night Shyamalan, Hartnett retoma su carrera con fuerza, aunque en sus propios términos.
El precio de la fama
A pesar de su meteórico ascenso en películas como Aulas peligrosas, Vírgenes suicidas, Pearl Harbor y La caída del halcón negro, Hartnett decidió alejarse de Hollywood para proteger su salud mental. En una entrevista reciente, el actor de 46 años explicó que la presión de la industria y el ritmo frenético de su vida lo llevaron a reevaluar sus prioridades.
"Conducía mi auto desde Minnesota para rodar O y luego regresaba. Pero la decisión de alejarme de la industria tuvo más que ver con la cordura", confesó Hartnett. El actor, que siempre evitó residir en Los Ángeles, señaló que el constante desplazamiento de un set a otro y la falta de una comunidad estable lo hicieron sentirse desarraigado.
Un regreso a las raíces
Después de alejarse del foco mediático, Hartnett se dedicó a proyectos independientes y a vivir una vida más tranquila en el Reino Unido con su esposa, Tamsin Egerton. Según Hartnett, su decisión de distanciarse de Hollywood fue impulsada por el deseo de mantenerse fiel a sí mismo y a su comunidad en Minnesota.
"Quería ser yo mismo entre la gente que conocía, así que pude volver con mi familia y amigos", afirmó el actor. A lo largo de su carrera, Hartnett ha descubierto que la fama no era lo que buscaba. "Después de cierto tiempo persiguiendo un objetivo, me di cuenta de que conseguirla no me daba la satisfacción que esperaba", explicó.
Hoy en día, Hartnett sigue valorando la importancia de la comunidad y la estabilidad emocional por encima de los logros profesionales. "Los logros son grandes en cualquier ámbito de la vida, pero lo que realmente te sostiene es tu comunidad", concluyó.
Con su regreso a la gran pantalla, Josh Hartnett demuestra que es posible triunfar en Hollywood sin perder de vista lo que realmente importa.