Blumhouse Productions ha sorprendido a críticos y audiencias con su remake de Speak No Evil, ahora titulada No hables con extraños. Dirigida por James Watkins y protagonizada por James McAvoy, Mackenzie Davis y Scoot McNairy, esta nueva versión supera a la película original danesa en varios aspectos clave, combinando tensión y humor negro de manera magistral.
La trama sigue a una familia estadounidense que, tras conocer a una familia británica en unas vacaciones, es invitada a su finca. Lo que comienza como una escapada idílica pronto se transforma en una pesadilla psicológica. La película mantiene elementos de la original, pero acelera el ritmo y refuerza los temas de clase social y diferencias culturales, con un enfoque mordaz sobre las normas sociales y la educación de los hijos.
El guion mejorado y el desarrollo de personajes más profundos, particularmente la actuación de McAvoy y Davis, destacan en esta reimaginación. Además, el tercer acto es especialmente impactante, combinando tensión y violencia con un toque de humor oscuro, culminando en un final inesperado que mantiene a los espectadores en el borde de sus asientos.
Con un equilibrio entre terror y sátira social, No hables con extraños se posiciona como una de las mejores producciones de Blumhouse en años, revitalizando el género con una propuesta fresca y envolvente.