Lo que en un principio era un espectáculo experimental de teatro culminó como una horrible tragedia que estremeció a los espectadores.
El actor italiano Raphael Schumacher de 27 años ejecutó su último acto dentro de la obra Miraggi, pero al mismo tiempo puso fin a su propia vida.
Al terminar la obra montada en el Teatro Lux de la ciudad italiana de Pisa, su personaje simulaba un ahorcamiento con una cuerda, pero Schumacher se estranguló.
Las primeras investigaciones todavía no determinan si se trato de un accidente o se trató de una acción premeditada.
Un joven que se encontraba entre la audiencia, que recién se había graduado en la licenciatura en medicina, se dio cuenta de inmediato que algo había salido mal al ver al intérprete temblando mientras colgaba, a pesar de que llevaba la cabeza cubierta por una bolsa.
De inmediato subió al escenario para aflojarle el nudo de la cuerda del cuello, luego bajó al actor al suelo con la ayuda de otro miembro del público, tras lo cual se solicitaron de emergencia los servicios médicos, quienes tras una breve revisión lo trasladaron en ambulancia la hospital, donde permanecía en coma.
Después de una serie de pruebas clínicas, Schumacher fue diagnosticado con muerte cerebral y los médicos lo declararon clínicamente muerto, según un portavoz del Cisanello Hospital en Pisa.
La policía local realiza la investigación que comenzó con los procedimientos de seguridad dentro de la puesta en escena, para saber quién o qué falló. O si se alteró intencionalmente los elementos necesarios para la escena. No se descarta la intervención de un tercero.
“El nudo debería de haber sido falso y el arnés debía sostenerlo si caía. No se entiende cómo pasó un incidente”, señaló al diario británico The Independent uno de sus compañeros en el montaje.
En otras declaraciones recogidas por el periódico italiano Il Giorno, el director de la compañía teatral afirmó que Schumacher cambió el final de la obra en el último minuto, modificando la manera en la que su personaje se quitaba la vida.
“El monólogo original incluía un disparo con una pistola de utilería, pero repentinamente él lo cambió por un ahorcamiento... sin decirnos la razón.”
Al parecer, la representación en la que resultó lesionado era un espectáculo colectivo que se desarrollaba al mismo tiempo en diferentes espacios del Teatro Lux con espectadores caminando entre los actores amateurs.
Según el periódico italiano La Stampa, Raphael Schumacher, originario de la provincia de Varese, residía en Pisa, a donde se mudó para estudiar actuación.
OTROS CASOS
Ésta no es la primera ocasión en la que un actor muere en escena, ya sea accidental o intencionalmente.
El caso de Raphael Schumacher parece una versión real de las secuencias finales de Birdman, en la que su protagonista, Riggan (Michael Keaton) se da un disparo en la cabeza.
-Brandon Lee (El cuervo)
En 1993, Brandon Lee falleció tras recibir una serie de disparos en el abdomen en una escena de la cinta El Cuervo. Las investigaciones indicaron que al interior del revólver había una antigua bala calibre 44 que había pasado inadvertida durante la revisión.
-Antonio Velasco (Juana la alacrana)
En 2003, el actor Flavio Peniche recibió un revólver con balas de verdad en lugar de las de salva y lo disparó contra un extra, de nombre Antonio Velasco, al que ocasionó heridas graves y su traslado a un hospital de Cuernavaca, donde murió poco después. | Excélsir