Con una semana de retraso por problemas técnicos, la Organización de Investigación Espacial de la India (ISRO), lanzó con rumbo a la Luna su misión Chandrayaan-2, que podría convertirse en la primera nave india en aterrizar suavemente en el polo sur de nuestro satélite natural dentro de dos meses.

La misión dará varias vueltas alrededor de la órbita terrestre para que los ingenieros comprueben que todos los componentes funcionen perfectamente, luego comenzará a seguir órbitas cada vez más elípticas hasta encender los propulsores y salir en línea recta hacia la Luna, donde será atraída por la gravedad, allí comenzará a dar vueltas en torno al satélite, hasta acercarse a 100 kilómetros de la superficie.

En ese momento se desprenderá el alunizaje Vikram, llamado así en honor del padre del programa espacial indio Vikram Sarabhai, fallecido en 1971.El alunizaje del Vikram ha sido descrita como la parte más delicada de toda la misión por el reto tecnológico que implica para la India.

El destino de la misión es una llanura situada entre Manzinus C y Simpelius N, dos cráteres situados cerca del polo sur de la Luna. Tras el alunizaje, un pequeño rover de seis ruedas hará un recorrido de medio kilómetro por la superficie.

Originalmente esta era una misión conjunta con Rusia, que debía aportar el módulo lunar, pero el desastre de Fobos-Grunt, la misión rusa dirigida a Fobos, uno de los satélites de Marte, que debía recoger muestras de su superficie y regresar, hicieron que la agencia espacial rusa se retirara del proyecto.

En 2008, la India envió la nave Chandrayaan 1 con el fin de orbitar la Luna. Si todo sale bien, la India podría convertirse en el cuarto país en poner un aparato en el satélite.
 

FUENTE: ISRO / CE