YouTube se despedirá del recuento en su botón «No Me gusta» (Dislike) en todos sus videos a partir de hoy. El anuncio fue dado a conocer por la compañía como una medida que busca frenar practicas de acoso para los creadores más pequeños.
A decir de la plataforma de videos este movimiento, que emula a lo hecho por Instagram hace algún tiempo, busca promover «interacciones respetuosas entre espectadores y creadores».
Este movimiento no es menor ni tampoco es una sorpresa. En realidad se trata de un cambio que ya se preveía luego de que en marzo pasado, Youtube anunciara que se estaba probando ocultar el número de «dislikes» que alcanzaba un video.
La eliminación pública de esta información se acompañaba de una opción para los creadores de ocultar las calificaciones obtenidas en sus materiales.
Adiós a los dislikes en YouTube
En este tenor, la confirmación de la desaparición del conteo público del botón dislike llega en un momento en el que las plataformas y redes sociales de todo tipo y tamaño están siendo demandadas para garantizar espacios de interacción sana entre sus usuarios.
Lo cierto es que la desaparición de dicho conteo para el grueso del público puede tener pros y contras. En principio es justo reconocer que el botón «No me gusta» se mantendrá en la plataforma de YouTube, pero el total de estas reacciones que se generen solo serán visibles para el creador del contenido.
En términos de la evaluación que los usuarios hacen del material. Hasta ahora, el público de YouTube está acostumbrado a ver la proporción de me gusta y no me gusta tan pronto como abre un video y se trata de un parámetro utilizado para decidir si vale o no la pena ver por completo el material.
Adicional, y quizás más importante, aunque se trata de un movimiento de YouTube que busca erradicar las prácticas nocivas en el sitio, también estaría eliminando una de las formas de denuncia más accesibles y fáciles para los espectadores, por ejemplo, cuando hablamos de un material que se presenta como informativos pero en realidad es promocional.
A pesar de las pruebas alrededor de la eliminación pública del conteo de dislikes, solo el tiempo dirá si esta decisión tomada por YouTube en verdad será efectiva para cumplir el fin propuesto por la plataforma.