Comprar una PS5 hoy es prácticamente imposible, no es ninguna novedad. Desde su lanzamiento en noviembre del 2020, a Sony le ha costado horrores lograr una disponibilidad fluida de su nueva consola.
En parte esto se debe a la escasez de componentes que afecta a múltiples industrias, pero también a la altísima demanda por parte del público. Y por ello la corporación japonesa ya habría definido su plan para contrarrestar esa faltante, e implicaría ni más ni menos que continuar con la producción de la PS4.
A primera vista no parece una idea demasiado original, pues hasta ahora nunca supimos que Sony planease eliminar a la PS4 de su catálogo activo. Sin embargo, internamente los planes de la compañía habría sido diferentes. Según publica Bloomberg, los asiáticos pensaban descontinuar dicha consola a fines del 2021 para favorecer una transición rápida hacia la PlayStation 5. Pero la imposibilidad de cumplir con las permanentes solicitudes de los potenciales compradores los habría obligado a modificar esa hoja de ruta.
El citado informe menciona que el año pasado los japoneses habrían informado a sus asociados que continuarían con la producción de la PlayStation 4 al menos durante todo el 2022. Así, la intención sería mantener el modelo anterior de la consola como una alternativa atractiva para los usuarios, mientras se le quita presión a la PS5. De todos modos, no se menciona si la continuidad de la PS4 en la línea de montaje sería para todos los modelos —original, Slim y Pro—, o si se priorizaría alguno sobre otro.
La PlayStation 4 sería el salvavidas de Sony ante la escasez de la PS5
Si Sony revirtió la descontinuación de la PS4 como una respuesta a la alta demanda de la PS5, parece haber lógica en esa determinación. En primer lugar, la consola lanzada originalmente en 2013 requiere de chips menos avanzados que su versión más reciente. Además, Bloomberg asegura que mantener a la PlayStation 4 con vida les permitirá a los asiáticos negociar mejores acuerdos con sus proveedores de componentes.
Y tampoco hay que olvidar la retrocompatibilidad de la PS5 con la mayoría de los juegos lanzados para su predecesora. Así, alguien que no acceda a la actual consola, pero sí al modelo anterior, más adelante podrá evolucionar de dispositivo sin perder sus títulos. Pero esto no es todo; con más de 100 millones de unidades vendidas desde su llegada al mercado, la PS4 sostiene un legado como éxito en ventas.
Queda claro, de todos modos, que demorar la descontinuación de la PlayStation 4 no será una solución definitiva a la escasez de la PlayStation 5. Sin embargo, Sony puede ganar un poco de tiempo y hacerse de un poco de oxígeno para tratar de normalizar la provisión de su más reciente consola, algo con lo cual ha penado prácticamente desde su lanzamiento.
Desde que la PS5 llegó al mercado ha roto varios récords de ventas a pesar de la falta de disponibilidad regular. Incluso pareció sacarle una importante ventaja a las Xbox Series X|S en la carrera que emprendieron con su salida a la venta; sin embargo el paso de los meses ha pasado factura a Sony. En la parte final del 2021, los asiáticos se vieron obligados a recortar sus expectativas de producción de la PS5 ante la imposibilidad de asegurarse el stock necesario de componentes para cumplir con su meta original.