Toyota ha hecho un llamado a revisión del bZ4X, su primer SUV eléctrico, a menos de dos meses de su lanzamiento. El fabricante japonés confirmó que los pernos podrían aflojarse al conducir, provocando que la rueda se desprendiera. Para evitar accidentes, Toyota ha realizado un llamado de 2.700 vehículos, la mayoría de ellos distribuidos en Europa.
De acuerdo con Reuters, el regulador de seguridad de Japón advirtió que los giros o frenados bruscos provocarían que se aflojara un perno, lo que eventualmente llevaría a un desprendimiento total de la rueda. Pese a que todavía no existen reportes de accidentes, Toyota no quiere arriesgarse y ha pedido a los dueños del SUV que no lo utilicen.
“Nos disculpamos sinceramente por cualquier inconveniente que esto les cause”, dijo Toyota en su web. “Lo hubiéramos reparado lo antes posible, pero estamos investigando los detalles”. De los 2.700 vehículos llamados a revisión, 2.200 fueron distribuidos en Europa, 260 a Estados Unidos, 110 a Japón y 20 a Canadá. La mayoría de ellos no se han entregado a los clientes. En el caso de Japón, Toyota solo ofrece el bZ4X por medio de su programa de arrendamiento, KINTO.
Según Toyota, el problema de los pernos no afecta a todos los bZ4X, aunque no reveló cuántas unidades de su SUV eléctrico fabricó. Algunos analistas consideran que este coche es un conejillo de indias de la estrategia a futuro de la empresa. La japonesa planea lanzar 30 modelos eléctricos y estima vender 3,5 millones de vehículos por año para 2030.
El bZ4X es la primera apuesta de Toyota en los coches eléctricos
Aunque Toyota ya había experimentado en el mercado de los coches eléctricos con la RAV4 EV — producida en conjunto con Tesla — el bZ4X es su primera gran apuesta para el mercado global. El SUV eléctrico competiría con el Volkswagen ID.4 y el Nissan Ariya, aunque la empresa deberá esperar a resolver todos los fallos.
El bZ4X es el primero de la serie "Toyota Bz", un grupo de 15 coches cero emisiones programados para debutar antes del 2025. El SUV eléctrico está basado en la plataforma modular e-TNGA, desarrollada en conjunto con Subaru, y se ofrece en dos variantes. La primera, de tracción delantera, es impulsada por un motor de 201 caballos de fuerza, tiene una autonomía de 500 km (WLPT) y alcanza los 100 km/h en apenas 8,4 segundos. La segunda integra un motor doble con potencia de 215 caballos de fuerza, autonomía de 460 km (WLPT) y consigue los 100 km/h en apenas 7,7 segundos.
Ambos modelos integran una batería de 71,4 kWh que está a la par con el Volkswagen ID.4. El bZ4X acepta carga rápida a una tasa máxima de 150 kW. Con un cargador rápido se alcanza el 80% de su capacidad en solo 30 minutos. Toyota garantiza que la batería conservará el 90% de su capacidad durante los primeros diez años.
Pese a las críticas de Europa sobre la reacción tardía de Toyota para lanzar un coche eléctrico, lo cierto es que este segmento únicamente representa el 1% de ventas en Japón. El fabricante sigue apostando por modelos híbridos, como el Prius, para agilizar la transición a un futuro sin coches de gasolina.