Tesla atraviesa dos demandas por la grabación a usuarios dentro y fuera de sus vehículos, ya que este contenido no quedaba en completa privacidad y los empleados podían acceder a él.
Esta información la dio a conocer Reuters, que tuvo acceso al testimonio de trabajadores que aceptaron que en los vídeos había imágenes de personas desnudas, menores de edad, accidentes y mucho más, que terminaban en bromas internas.
Una situación que va en contra del objetivo inicial de instalar cámaras en los autos, que consiste en dar una herramienta de seguridad a los conductores para registrar posibles casos de robo o accidentes.
Grabaciones fuera del auto
El modo centinela de los Tesla es el que protagoniza una de las demandas, que fue impuesta por la Asociación Alemana de Centrales de Consumidores (VZBV, por sus siglas en alemán).
Esta función permite a los autos, mientras están estacionados y apagados, grabar su entorno para detectar golpes, personas que se acerquen o movimientos que representen algún peligro y alertar al conductor.
Un sistema que ya había sido puesto en duda hace un tiempo, pero que ahora entró en un proceso legal en Alemania, donde acusan a la empresa de no haber alertado a los conductores de una potencial violación de las leyes de privacidad.
Una situación por la que la empresa de Elon Musk también ha tenido procesos frente a autoridades en otros países, como China y Países Bajos, donde finalmente no fue multada por los cambios que realizó al sistema de cámaras, en las que el usuario es quien debe activar la función y el sensor tendrá una luz que indicará que está grabando.
Grabaciones dentro del auto
Este segundo proceso tiene muchas más implicaciones, porque en el material grabado hay imágenes de personas desnudas y menores de edad que cayeron en manos de empleados. Por ese motivo, una persona presentó una denuncia en California, Estados Unidos, alegando que los trabajadores habían compartido “vídeos e imágenes altamente invasivos” por diversión y humillación de quienes aparecen en el material.
En los últimos años, Tesla ha estado implementando en sus vehículos sistemas con inteligencia artificial para identificar posibles riesgos para el conductor. Para eso han usado cámaras fuera y dentro del carro que den toda la información para lanzar alertas durante la conducción semiautomática.
La compañía aseguró que las imágenes grabadas quedan en el anonimato y no hay manera de que los empleados sepan quienes son. Pero la información de Reuters apunta a que el problema va en otra dirección.
Gracias a esas cámaras, los trabajadores tuvieron acceso a contenido en el que hay personas caminando desnudas, usando juguetes sexuales, accidentes de tránsito con niños implicados y en general “cosas realmente íntimas”.
“Fue una violación de la privacidad, para ser honesto. Y siempre bromeaba diciendo que nunca compraría un Tesla después de ver cómo trataban a algunas de estas personas”, dijo uno de los empleados, que dio su testimonio bajo anonimato a la agencia de noticias.
Con este contenido, los empleados empezaron a crear memes internos, en medio de cuestionamientos propios de sí lo que estaban haciendo era legal o no. “No creo que las personas que compran el coche sepan que su privacidad no es respetada”, mencionó un trabajador.
La demanda por este caso busca que se convierta en una acusación colectiva, al haber varias personas implicadas en las grabaciones.