El uso constante de computadoras en la vida cotidiana ha generado preocupaciones sobre los efectos negativos en la salud. Investigaciones realizadas por la Universidad de Ciencias Médicas de Guantánamo han identificado los principales problemas derivados de pasar largas horas frente a la pantalla, entre ellos: dolor en la espalda, cuello y hombros, debilidad muscular, lesiones por esfuerzo repetitivo, síndrome del túnel carpiano, problemas de visión y enfermedades relacionadas con el sedentarismo, como la obesidad y problemas cardíacos.
Para evitar estos problemas, los expertos recomiendan varias acciones preventivas. Primero, es fundamental desinfectar regularmente los equipos de trabajo, como el teclado y el mouse, para evitar infecciones. Además, el uso de herramientas ergonómicas, como sillas con buen soporte y accesorios que protejan las muñecas, es crucial para prevenir lesiones.
También se aconseja proteger los ojos con cristales antirreflejos y mantener la pantalla a una distancia adecuada y con un brillo moderado. Adoptar una postura correcta, con la espalda recta y los pies firmemente apoyados en el suelo, ayuda a reducir el estrés en el cuello y los hombros.
Es importante tomar descansos frecuentes de al menos cinco minutos cada 45 minutos de trabajo y descansar la vista cada 20 minutos, mirando un objeto a lo lejos para evitar el estrés ocular. Finalmente, incluir actividad física diaria es esencial para combatir los efectos del sedentarismo y mantener la flexibilidad muscular.
Con estas recomendaciones, se puede mitigar el impacto negativo de las largas horas frente a la computadora y promover una mejor salud en el entorno laboral o académico.