Los chatbots de inteligencia artificial están ganando popularidad como herramientas para ofrecer apoyo emocional, especialmente en redes sociales. Muchos usuarios recurren a estos bots para hablar sobre sus problemas y recibir consejos, destacándose aplicaciones como ChatGPT, que permite a los usuarios interactuar con modelos de IA adaptados para brindar ayuda. Un ejemplo es el chatbot Therapist GPT, creado por un usuario de ChatGPT, que ofrece una conversación empática y consejos sobre cómo afrontar situaciones difíciles. Sin embargo, el bot aclara que no es un sustituto de un terapeuta profesional. A pesar de esto, muchos como Mya Dunham, de 24 años, utilizan la herramienta para obtener una perspectiva diferente sobre sus pensamientos y emociones.
Dunham comenzó a usar ChatGPT después de ver recomendaciones en redes sociales, y afirma que el bot fue mucho más comprensivo de lo que esperaba. Aunque algunos usuarios apoyan el uso de chatbots con fines terapéuticos, otros expresan preocupaciones sobre la efectividad y ética de estos sistemas. Los expertos en salud mental, como el Dr. Russell Fulmer, señalan que los chatbots pueden ser útiles para algunos usuarios con ansiedad o depresión leves, ya que la falta de juicio humano puede hacer que las personas se abran más fácilmente. Sin embargo, enfatizan que estos bots deben ser usados en conjunto con terapia profesional para evitar posibles malentendidos o consejos erróneos.
Por otro lado, la Dra. Marlynn Wei advierte sobre los riesgos de los chatbots generales, ya que podrían dar respuestas imprecisas o incluso perjudiciales. Señala que los chatbots de IA aún tienen limitaciones en cuanto a seguridad y ética, y recomienda que los usuarios busquen siempre el apoyo de un terapeuta humano para tratar cuestiones de salud mental más complejas. Aunque la tecnología continúa desarrollándose, los expertos coinciden en que los chatbots podrían ser herramientas útiles para complementar el apoyo emocional, pero siempre deben ser manejados con precaución y en colaboración con profesionales de la salud mental.
Los chatbots de inteligencia artificial pueden ofrecer un apoyo útil en situaciones donde las personas necesiten un espacio para expresarse, especialmente para quienes tienen ansiedad leve o buscan una perspectiva diferente sobre sus emociones. Sin embargo, es importante reconocer que, aunque estos sistemas pueden ser empáticos y brindar estrategias de afrontamiento, no pueden reemplazar el juicio y la experiencia de un terapeuta humano. La salud mental es compleja, y en casos más graves, el acompañamiento profesional es fundamental para proporcionar un tratamiento adecuado. Por lo tanto, los chatbots de IA pueden ser una herramienta complementaria interesante, pero siempre deben usarse con precaución y como apoyo adicional a la terapia tradicional, no como un sustituto. Es un área que seguirá evolucionando, y las investigaciones y regulaciones sobre el tema serán clave para garantizar que se utilicen de manera ética y efectiva.
El modo "Therapist" o "Therapist GPT" no es una función oficial de ChatGPT, sino una personalización creada por los usuarios de ChatGPT mediante la posibilidad de ajustar el modelo para adaptarlo a roles o propósitos específicos, como la terapia conversacional. Puedes simular una conversación con un enfoque terapéutico simplemente pidiendo a ChatGPT que actúe como un "terapeuta virtual", pero es importante recordar que, aunque puede proporcionar apoyo emocional básico, no reemplaza a un profesional de la salud mental.
Si deseas recibir respuestas con un enfoque terapéutico, puedes indicar a ChatpGPT algo como:
"Actúa como un terapeuta y ayúdame a hablar sobre mis emociones",
y así se ajustarán las respuestas para ofrecerte una conversación empática y reflexiva, dentro de las capacidades de este modelo.
Recuerda que, aunque el bot puede ofrecer consejos y escucha activa, si estás buscando ayuda profesional o enfrentando problemas emocionales serios, siempre es necesario consultar a un especialista.