En Tokio, el café Dawn ha revolucionado el concepto de atención al cliente con robots que, aunque parecen autónomos, están siendo operados por personas desde cualquier lugar del mundo. Esta innovación no solo ofrece una experiencia única a los clientes, sino que también representa una oportunidad de empleo para personas con discapacidades o que viven fuera del país.
Los robots en Dawn, conocidos como OriHime, son la cara visible del negocio. Cada uno es controlado a distancia por un "piloto" a través de un teléfono o tableta. Estos robots reciben a los clientes, toman pedidos, interactúan de manera amigable y llevan las bebidas hasta las mesas. Los pilotos, que pueden estar en cualquier parte del mundo, operan los robots y se comunican con los comensales, haciendo que la experiencia sea tanto tecnológica como humana.
Kentaro Yoshifuji, el creador de OriHime, considera que su invento es una forma de "teletransportación", ya que permite que una persona se encuentre presente en un lugar sin estar físicamente allí. Este concepto tiene un impacto social importante, ya que brinda acceso al trabajo a personas discapacitadas que, de otra manera, tendrían dificultades para conseguir empleo.
Dawn abrió en 2021 en un contexto donde Japón enfrentaba restricciones por la pandemia. A pesar de los desafíos financieros en sus primeros dos años, el café se ha vuelto económicamente viable y ahora opera de forma rentable, lo que le ha permitido considerar la expansión a otras ubicaciones. El café también ha generado interés internacional, con visitantes de todo el mundo, como turistas y expatriados, quienes valoran la innovadora combinación de tecnología y empatía.
El modelo de negocio no solo está enfocado en la automatización, sino que también busca reconfigurar las definiciones tradicionales de "trabajo" y "presencia". Yoshifuji espera que OriHime, y otros robots como él, puedan ayudar a cambiar la cultura laboral en Japón, especialmente en un país con una población envejecida y una alta tasa de personas con discapacidad.
Con su visión de un futuro donde las barreras de movilidad no impidan el acceso al trabajo, Yoshifuji aspira a que los robots OriHime se utilicen en escuelas, universidades y oficinas, permitiendo a más personas participar activamente en la sociedad y la economía. Esta tecnología no solo plantea soluciones económicas, sino también sociales, ofreciendo una nueva forma de inclusión y de conexión entre las personas.
Si estás de viaje por Japón o tienes planeado hacerlo, este es un lugar que no te puedes perder, te dejamos el sitio del café para que tengas toda la información necesaria
https://dawn2021.orylab.com/en/