El Instituto Politécnico Nacional (IPN) y el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han creado un Sensor Urbano que utiliza Inteligencia Artificial y tecnología de última generación para mejorar el monitoreo de la calidad del aire en ciudades mexicanas.
Este dispositivo compacto genera coordenadas GPS en tiempo real y recopila datos sobre monóxido de carbono (CO) y partículas suspendidas (PM 2.5 y PM 10), proporcionando información clave sobre la contaminación en áreas con alta movilidad peatonal.
El proyecto, liderado por Roberto Zagal Flores del IPN y en colaboración con el Senseable City Lab del MIT, utiliza la plataforma de código abierto Flatburn, adaptada con sensores avanzados y paneles solares. Actualmente, se están realizando pruebas en autobuses que circulan entre el Metro La Raza y ESCOM en la Ciudad de México.
El Sensor Urbano es modular y escalable, permitiendo futuras mejoras como cámaras térmicas y sensores para medir dióxido de azufre y nitrógeno. Además, su desarrollo es susceptible de patentamiento.
Gracias a esta innovación, México podría avanzar hacia la consolidación de Ciudades Inteligentes y Saludables, optimizando la toma de decisiones en materia ambiental y fortaleciendo las estrategias para combatir la contaminación.