Apple ha revelado un ambicioso plan para invertir 500.000 millones de dólares en los próximos cinco años en infraestructura de inteligencia artificial (IA) y nuevas instalaciones de servidores en Estados Unidos. Esta inversión también creará más de 20.000 nuevos puestos de trabajo en el país.
La medida responde a los nuevos aranceles sobre importaciones desde China, lo que ha afectado a varias grandes empresas tecnológicas. Apple, que hasta ahora ha fabricado gran parte de sus productos en China, apuesta por esta iniciativa para reducir los costos derivados de los aranceles y fortalecer su presencia local.
El CEO de Apple, Tim Cook, destacó la importancia de esta inversión en el futuro de la innovación estadounidense, reafirmando su compromiso con el país y con el desarrollo de la inteligencia artificial. Con este plan, Apple no solo impulsará la creación de empleo, sino que también fortalecerá su infraestructura tecnológica en EE.UU.