En una charla durante la Code Conference de Re/code con el conocido periodista Walt Mossberg, a Musk le preguntaron acerca de cómo creía que debería ser un orden legal para los primeros colonos en Marte, y en su respuesta estableció cómo debería ser el sistema de gobierno marciano basándose en dos ideas: evitar la corrupción a como de lugar, y que sea más difícil crear una ley que descartar una ley ya existente:
“Creo que el sistema de gobierno ideal para Marte sería una democracia directa, porque de esta forma disminuye considerablemente la posibilidad de corrupción en el gobierno si lo comparamos con una democracia representativa. La idea debe ser que las personas participen en las decisiones y no representantes que pueden tener sus propias intenciones.
Además, las leyes no deben ser eternas. Creo que debe ser mucho más fácil derrocar una ley existente que crear una nueva, la cual debe llevar trabajo y ser considerada desde todos los puntos de vista posibles antes de entrar en vigencia”.
Básicamente lo que propone Musk es que, por poner un ejemplo, una ley requiera de al menos el 60% de los votos para poder crearse en Marte, mientras que para ser derrocada requiera de un 40% de los votos. Eso, para mantener las leyes mucho más dinámicas y acordes a las necesidades puntuales. Ni las leyes ni una constitución deberían durar para siempre, y el Señor Musk lo tiene claro.
El cofundador de SpaceX (entre tantas otras compañías) también mencionó que su sueño es que las primeras personas lleguen a Marte para el año 2024, algo quizás apresurado, tomando en cuenta que al día de hoy este es un viaje de solo ida, sin retorno.
En el pasado ya habíamos escuchado a Musk proponer algunas ideas radicales como lanzar bombas nucleares en Marte para acelerar el efecto invernadero en el planeta rojo y así hacerlo habitable. Sea como sea, Musk tiene claro que su ambición espacial va mucho más allá de recuperar cohetes espaciales mediante aterrizajes en vertical. Lo que realmente quiere es conquistar el planeta rojo. [vía Gizmodo]