En la actualidad, la tecnología está en todas partes. Cada vez es más habitual ver a niños con sus tabletas en restaurantes, transporte público o con sus amigos en el parque. Incluso son muchos los que pasan toda la tarde en casa haciéndose fotos o contestando WhatsApp o correos electrónicos. Nuestros hijos, nativos digitales, hacen un uso excepcional de estos dispositivos y, sin duda, es positivo que se explayen e investiguen este magnífico universo, pero si se pasan también puede ser peligroso.
La Asociación de Pediatría Española advierte de que los niños entre cuatro y 12 años pasan casi 1.000 horas al año delante de las pantallas del televisor, ordenador o con juegos electrónicos. Este comportamiento les lleva a hábitos poco saludables, como es el sedentarismo, cuyas consecuencias pueden conllevar padecer obesidad o diabetes en un futuro, pero también afecta mucho a sus relaciones familiares y sociales. Aunque los expertos consideran que en la adicción a las nuevas tecnologías influye, principalmente, el tiempo que pasa el niño delante de la pantalla, también es muy importante cómo los niños usan los dispositivos que tienen a mano.
¿Cómo puedo saber si mi hijo usa adecuadamente sus dispositivos o es adicto a ellos?
"Es más importante saber cómo utilizan los menores dispositivos como los smartphones o tablets que el tiempo que pasan frente a ellas. Y esto es determinante a la hora establecer los problemas emocionales y sociales relacionados con su uso", esta es la principal conclusión de un último estudio elaborado por investigadores de la Universidad de Michigan y que se denomina Development and validation of the problematic media use measure: A parent report measure of screen media 'addiction' in children, publicado en la revista de la American Psychological Association. "Muchas veces los expertos cuantifican el tiempo de pantalla para discriminar lo que es saludable de lo que no”, se explica en un comunicado de la universidad.
“Nuestro estudio ha demostrado que hay algo que influye más que el número de horas que pasa un niño frente a la pantalla”, según Sarah Domoff, autora principal, en el texto. “Lo realmente importante”, prosigue, "es si su uso produce problemas en distintas áreas de la vida del individuo o, incluso, se ha convertido en el centro de su existencia”.
A pesar de que existe mucha investigación al respecto, según la autora, “esta es la primera herramienta que mide la adicción a las pantallas en niños de cuatro a 11 años y creo que va a ser muy útil para los padres". Los resultados surgieron tras dos estudios elaborados con madres y padres. En el primero se usó una muestra de 291 madres a las que entrevistaron sobre los hábitos tecnológicos de sus hijos y en el segundo, de 632 papás y mamás.
Para llegar a las conclusiones, se usaron los mismos criterios que indica el DSM V, para muchos la biblia de los trastornos psiquiátricos, en relación con la Adicción Al juego en Internet, pero aplicados a niños entre los cuatro y los 11 años. Los primeros resultados mostraron que en cuanto a adicción a la tecnología no se aprecia diferencia entre géneros. Entre los síntomas encontrados por estos expertos están: que el niño use las nuevas tecnologías y esto afecte a sus quehaceres diarios; que su comportamiento provoque conflicto entre el niño y la familia; o que sea la única actividad que le produce felicidad. Concretamos los nueve que establacieron.
9 conductas que te pueden ayudar a saber si tu hijo es adicto
1.- No tiene control: Para el niño es muy difícil parar de usar los dispositivos
2.- Ha perdido el interés por todo lo demás: parece que tu hijo solo se siente motivado por las nuevas tecnologías
3.- Solo piensa en una cosa: parece que el pequeño solo piensa en sus dispositivos y qué hacer con ellos.
4.- Su comportamiento interfiere con las relaciones de la familia: su exposición a las pantallas interfiere con las actividades cotidianas de su familia.
5.- Y produce conflicto y peleas: Además, las relaciones entre los miembros de la familia y él pueden ser muy broncas.
6.- No usar su tableta le provoca frustración: si no usa sus dispositivos lo pasa mal.
7.- El niño pasa cada vez más tiempo delante de una pantalla.
8.- Tu hijo miente para usar los dispositivos.
9.- Cuando el niño tiene un mal día, los dispositivos parecen ser lo único que le ayuda a sentirse mejor.
Siguiendo los mismos criterios del DSM V se podría considerar que el niño sería adicto leve si reúne de 4 a 5 de los 9 criterios; moderado, de 6 a 7 criterios, y severo si reúne de 8 a 9.
“Los niños que usan las nuevas tecnologías de una forma no saludable tienen problemas en su forma de relacionarse con los demás, en su conducta, y suelen padecer otros síntomas emocionales", agrega en el texto. "Aunque el estudio no ha evaluado si los problemas de comportamiento son anteriores o posteriores al uso excesivo y dañino de los dispositivos tecnológicos”, concluye la experta.
La buena noticia es que, siempre y cuando tu hijo no muestre ninguna de estas señales de adicción a la pantalla, lo más probable es que no haya problema en mantenerlos entretenidos con juegos en su iPad durante hora, según este estudio.