El asunto está pasando de ser algo generacional a sistémico, pues de más de 1,200 padres y adolescentes entrevistados en México, el 50% de adolescentes se siente adicto a su dispositivo móvil, pero la cifra no es muy dispar del 45% de padres que manifestaron sentirse de la misma manera.
El asunto es que casi tres cuartas partes de los padres que se sienten adictos, tienen también a un hijo que se siente igual.
Hábitos que se heredan
Pero si se trata de tiempo de conexión, padres rebasan a sus hijos, donde 67% de adolescentes dicen que usan su dispositivo casi todo el tiempo, contra el 71% de padres que admiten estar conectados de forma casi permanente. Incluso el uso más común es también similar entre ambos sectores, donde 80% de padres dijo usar su smartphone principalmente para redes sociales mientras que el porcentaje disminuye ligeramente a un 76% en el caso de adolescentes.
Según el estudio, un tercio de adolescentes se despierta para revisar su dispositivo al menos una vez durante la noche, ya sea para ver un mensaje, entrar a redes sociales o solo consultar la hora. La cifra en padres curiosamente es idéntica
Aún con cifras tan idénticas de uso de móviles, dos tercios de los padres entrevistados piensan que sus hijos adolescentes pasan demasiado tiempo en su smartphone; incluso, un 62% cree que sus hijos son adictos. La misma pregunta fue hecha a adolescentes, en donde solo un 31% opinó que sus padres son adictos al móvil.
El estudio fue aplicado también en Estados Unidos, Japón y Reino Unido, de manera que ofrece comparativas interesantes entre los cuatro países. Además del mencionado dato que sitúa a los adolescentes mexicanos como los que se sienten más adictos a su smartphone entre los países de la encuesta, más padres y adolescentes en México dijeron distraerse al menos una vez al día respecto a los resultados de los otros países.
De ahí entonces que cobre sentido la estadística de que más padres y adolescentes mexicanos intentan reducir la cantidad que pasan en sus móviles, siendo un 33% de padres y un 29% de adolescentes los que coinciden con la afirmación.
El estudio es asegurado que representa demográficamente a todo el país, aunque se destaca que la encuesta no tiene como sujetos a quienes viven en comunidades inferiores a los 2,500 habitantes. Además, la encuesta fue hecha vía correo electrónico, de manera que solo podía contestarse en dispositivos conectados, asegurando que los encuestados tienen acceso a internet sin complicaciones.