La cultura de la bicicleta está creciendo. Aunque puede parecer que está de moda, no significa que sea malo. Al contrario, es un momento increíble para subirse a rodar en algunas de las calles de la Ciudad. Entre ciclovías y ecobicis, la cultura de la bicicleta se está ganando un lugar y, al mismo tiempo, es mas fácil sacarle mayor provecho.
Flexible
Andar sobre cuatro ruedas puede implicar no sufrir si de distancias largas hablamos. Sin embargo, tomar la bicicleta para distancias relativamente cortas (tal vez no más de 10 kilómetros) en un terreno relativamente parejo, hace que la posibilidad de cambiar rutas y planes sea mucho más flexible e incluso, divertido.
Te vas a ver bien
¡Por todo el ejercicio que vas a hacer! Si bien no quemas tantas calorías como al correr, sí quemas más que si estuvieras sentado sólo cambiando de primera a segunda en tu coche.
Tendrás una perspectiva diferente de las cosas
Andar en bici te da una perspectiva diferente de tu ciudad. Ves cosas que antes no notaste y descubres otras que de otra forma no lo hubieras hecho. No solo eso, es un cambio de mentalidad en las formas de movilidad en la ciudad. Te puedes volver más crítico.
Eres tú y tus pensamientos
Ir en bicicleta difícilmente implica charlar con alguien. Pedalear en la ciudad te da momentos de soledad y disfrute de tu persona que de otra forma no tendrías.