Y no, no es un hecho que los pequeños deban odiar las labores del hogar, pero todo dependerá de cómo lo aprendieron.
De acuerdo con los especialistas, es necesario que los niños comiencen a aprender su rol dentro de la familia y la casa (es decir, cuáles son sus responsabilidades) desde antes de que comiencen la primaria, ya que esto de ninguna manera afectará sus deberes escolares como muchos padres piensan.
En ese sentido, Deborah Gilboa, doctora en medicina familiar del Centro de Salud de Squirrel Hill en Pennsylvania explicó al programa ‘Today’ que los padres tienen una noción errónea de la prioridad de las actividades escolares de sus hijos pues evitan darles responsabilidades en casa pensando que de esa manera, los niños le darán más tiempo a su tarea.
Pero adivina qué… si tú eres de los papás que hacen esto, podrías estar consintiendo de más a tus pequeños.
De hecho, un estudio realizado por la compañía Braun Research, reveló que solo el 28% de 1000 padres encuestados, dijo estarle dando tareas en la limpieza de la casa a sus hijos, a pesar de que el 82% aceptó haber crecido ayudando en el hogar.
¿Entonces a qué edad deben comenzar a ayudar?
Una investigación de la Universidad de Minnesota encontró que el mejor augurio de éxito en la edad adulta de una persona, en las medidas relacionadas con la finalización de la educación, es haber comenzado a realizar tareas domésticas a los 3 o 4 años.
Por ejemplo, cuando los niños son pequeños quieren ayudar a poner la mesa o preparar la cena; aprovecha esas oportunidades para ir adentrando a tus hijos a las responsabilidades de la casa.
Según la doctora Gilboa, introducir a los niños en los quehaceres del hogar a partir del año y medio hasta los 3 años (en tareas que no requieran gran esfuerzo como sostener el recogedor), los convertirá en su etapa adulta en “solucionadores de problemas de buen carácter”.
Asimismo, cuando los pequeños alcanzan los 4 o 5 años, ya pueden adquirir más responsabilidades como recoger y organizar sus juguetes en el sentido que ellos consideren mejor.
Y a partir de los 6 años y hasta los 8, la doctora en medicina familiar recomendó asignarles a los niños una responsabilidad a la semana y poco a poco irlo aumentando hasta construir el hábito diario, como lavar sus trastes, tirar la basura o alimentar a las mascotas y recoger las heces.
A los 11-12 años en adelante, ya podrán lavar su ropa (en la lavadora).