Si tienes el mal hábito de meter algún objeto a tus oídos es momento de parar porque sin duda esto podría afectar tu salud de manera importante. Es momento de cuidar el órgano mediante el cuál escuchas, así que consiente a tus oídos y aprende a limpiarlos sin cotonetes.
Dentro de la higiene personal existen numerosas creencias o malas interpretaciones con respecto a cómo se deben limpiar ciertas áreas, quizá una de las que se debe tener mucho cuidado es específicamente esta ya que un mal manejo podría convertirse en un síndrome o incluso un infección.
Muchas personas se limpian los oídos con cotonetes porque esto les da la sensación de que con ello van a poder retirar la cera o cerumen que se acumula en el interior de la oreja; pero este es un gran error.
La acumulación de cera en el oído se puede presentar a través de síntomas como: comezón en los oídos, secreción del canal auditivo, disminución de la audición, zumbidos frecuentes, dolor en los oídos e incluso mareos.
Ahora te vamos a enseñar a cuidar tus oídos y limpiarlos sin cotonetes, pasadores o cualquier clase de objeto poco apropiado para esta área.
Métodos efectivos para limpiar sin hisopos el canal auditivo
- Aceite de oliva: Debes verter un poco de aceite tibio con un gotero y aplicar de dos a tres gotas en cada oído; inclinarás la cabeza para que el ingrediente llegue al interior y dejarás reposar por 10 minutos. Drenarás volteando la cabeza, debes aplicar al menos una vez a la semana
- Sal: Mezcla una cucharada de sal con agua tibia, sumerge una bola de algodón e inclina la cabeza. Deja a actuar durante tres minutos, deja drenar y limpia.
- Glicerina: Pon un par de gotas en el oído, inclina la cabeza y deja por tres minutos, este ingrediente te ayudará a suavizar el tapón de cera sin mayor problema.