¿Cuántas veces te ha pasado que estás intentando contarle a tu pareja o a una persona adulta algo que consideras importante, pero la otra persona parece estar en un mundo muy lejano a ti? Pues una frustración similar es la que experimentan los pequeños cuando te cuentan algo y los ignoras. Ahora te compartiremos por qué es importante escuchar lo que tu hijo te platica.
No solo se trata de un básico dentro del respeto y la educación, también habla mucho de la forma en la que tienes para relacionarte con tus pequeños; y es que este tipo de comportamientos los puede marcar de por vida.
Quizá te encuentras muy apurada, tal vez estás muy estrado, probablemente tienes demasiadas preocupaciones rondando tu cabeza; pero más allá de responder con monosílabos, tus hijos merecen ser escuchados.
Es importante escuchar lo que tu hijo te platica porque esto le brindará bases para el futuro; aunque no lo creas, este pequeño acto de atención les ayuda a sentirse mucho más seguros de sí mismos, experimentan confianza, pero también aprenden a dar lo mismo a cambio.
Quizá ellos te están contando algo con mucha emoción, incluso te hacen preguntas o cuestionan lo que piensas, pero lo único que has hecho en toda la plática es asentir y no estás haciendo una escucha activa. Prestar atención a tus pequeños puede cambiarlos para siempre.
¿Realmente sueles escuchar lo que tu hijo te platica?
Probablemente esto te parezca complicado al principio, principalmente porque las prioridades de tu hijo se encuentran en un plano infantil del que poco conoces o del que eres ajena, pero esto no quiere decir que no sea válido o importante.
Por ello, expertos en psicoterapia comparten algunos consejos para poder tener una mejor comunicación con los menores en todo momento. ¡Sigue estos tips y presta atención a tus pequeños antes de que sea tarde!
- Dedícale tiempo a escucharlo realmente, respeta los tiempos que has designado para hacerlo
- Sé abierto como padre a poder hablar de cosas cotidianas a lo largo del día, ayúdales a resolver los problemas de la rutina
- Permíteles hablar sobre sentimientos, no dejes que simplemente se mencionen, desarrollen el tema
- Descubre el lenguaje corporal de tus hijos
- Muéstrate igual de entusiasmada que ellos cuando te hablen de las cosas, transmíteles confianza
- Evita aleccionarlos, esto los hará desconfiar o no tendrán la seguridad de contarte algo la próxima vez
- No los interrumpas
Con información de Raising Children