Después de las fiestas decembrinas, llegan las rebajas de invierno. Son una buena oportunidad para darnos ese lujito que no pudimos costear en Navidad. Pero como invertir bien tiene su chiste, te contamos cómo comprar como toda una experta.
Lo típico es que las rebajas empiecen el 7 de enero, pero algunos grandes almacenes se adelantaron. Así que revisa tu presupuesto personal, las prendas que se quedaron en tu Whishlist y alístate para hacer compras inteligentes.
Si los Reyes Magos se atrasaron, pásales el dato que, aunque adquirir ropa es la sensación durante esta época, también hay ofertas en juguetes tanto en línea como en tiendas físicas.
¿Cómo comprar como toda una experta en las rebajas de enero?
Hay que decir que es mucho más barato comprar en una tienda online, además, probarse la ropa en tiendas físicas podría ser un problema en plena pandemia por COVID-19.
Sin importar la modalidad que elijas, más vale ajustar los pantalones que ir exponerte a un centro comercial y llegar con ropa en la que el nuevo coronavirus puede sobrevivir entre uno y dos días.
Prendas, accesorios de moda y hasta artículos para el hogar, compra de todo pero con estos trucos:
Limpia tu clóset. Así es, donar la ropa que no se usa (y que está en buenas condiciones) es la mejor forma de hacer espacio para lo nuevo. También puedes vender algunas prendas y comprar algo extra.
El mejor día para ir de compras. Si te decidiste por las tiendas físicas, el domingo es el mejor día para ir de rebajas, pues reponen tallaje. Los miércoles, por su parte, entra todo lo nuevo.
Lee los comentarios. Si vas a comprar en tiendas online, consulta reviews para elegir con más precisión la talla que mejor te va. Además, así descubrirás cuando un artículo no vale la pena.
Si compras electrodomésticos. No te vayas de la tienda sin que sellen la garantía de tus productos. Deben cumplir rigurosamente con la reglamentación y control de calidad.
Los artículos que vale la pena comprar. Encuentra decoraciones navideñas al mejor precio, grandes descuentos en televisores, sábanas, toallas y, por supuesto, ropa de invierno.
Lee las letras chiquitas. Suele suceder, cuando se trata de compras rebajadas, que no hay cambios ni devoluciones. Así que, si compras prendas de vestir, desatora la cremallera, revisa los acabados y hasta la etiqueta.