Uno de los problemas de salud más frecuentes en las personas es el de tener malestares al tragar o pasar saliva, ya sea por alergias o irritaciones comunes. Para ello, se han dado toda clase de consejos para mitigar esa molestia. Por eso, ahora te decimos si los bombones quemados quitan la tos y qué pasa si los comes.
Uno de los remedios caseros más populares es la de comer malvaviscos quemados para dejar de sentir picazón o cosquilleo en la garganta, algunos aseguran que es bastante efectivo, al grado de que puede darte una evidente sensación de alivio al instante.
Pero los expertos se han detenido a analizar cómo es que estos dulces podrían -o no- ayudarte a contrarrestar los malestares de una garganta irritada o inflamada. Y es que seguramente alguna vez tu abuelita te dijo que “te asaras unos bombones” para dejar de sentirte incómodo.
Y eso sí, es importante mencionar que no hay nada mejor que acudir al doctor antes que depositar toda la esperanza en un remedio casero; así es que si presentas síntomas como fiebre, cuerpo cortado, tos o escurrimiento nasal, será mejor que dejes de lado los bombones y visites a un especialista.
Pero si tu malestar proviene de otro tipo de situación, es momento de saber si realmente un bombón asado te ayudará a aliviar la garganta.
Te explicamos si los bombones quemados quitan la tos o no
De acuerdo con el portal especializado Healthline, aparentemente este remedio casero viene de una confusión. Y es que los bombones que se compran en la tienda no sirven en lo absoluto para quitar este malestar; lo que sí sirve es una planta llamada “raíz de malvavisco”.
“Los bombones que compras en la tienda para tu chocolate caliente contienen principalmente azúcar, agua y gelatina, lo que le da esa textura esponjosa. Ninguno de esos ingredientes tiene la capacidad de quitar el dolor de garganta“, apunta el estudio del mencionado sitio.
Ahora que sabes la verdad sobre si los bombones quemados quitan la tos o no, es momento de apostar por otras alternativas como:
- Tomar bebidas calientes para hidratarte
- Hacer gárgaras de agua con sal
- Humidificar el aire en tu hogar
- Chupar un caramelo
- Comer una paleta
- Beber un trago caliente
- Añadir miel a un té caliente