Casi siempre, de la mano de las plantas llega también ese verde césped que embellece los jardines. Sin embargo, en temporada de calor es muy propenso a secarse o a ponerse de un color triste y sin vida cuando no se le dan los cuidados adecuados. Por eso, ahora te daremos 3 trucos fáciles para que el pasto no se seque ni ponga amarillo en temporada de calor.
Dentro de los consejos más importantes de jardinería está el mantener en perfecto estado tu césped, principalmente porque este es el que le da gran parte de la vista a las áreas verdes de tu hogar. Cuando este se ve apagado podría restarle presencia a tu casa.
Por este motivo, ahora te recomendamos tomar en cuenta estos 3 trucos fáciles para que el pasto no se seque ni ponga amarillo en temporada de calor. Lo mejor es que no vas a requerir de acciones desesperadas cuando lo que aplicas es la prevención.
No hay nada más agradable que pasar una primavera y verano en medio de un jardín bien cuidado y con las atenciones adecuadas para que todo el tiempo se vea lleno de vitalidad.
Lo primero que debes tomar en cuenta es que en esta temporada de calor, en la primavera se debe regar cada dos días, mientras que en verano se sugiere hacerlo diariamente -en caso de que no llueva lo suficiente-. Teniendo esto en mente, ahora sí, a cuidar de tu césped.
¿Qué hacer para que el pasto no se seque o se ponga amarillento? Toma estos tips en cuenta
Si eres de los que le gusta mantener su jardín en todo momento radiante y fresco, entonces debes tomar estos consejos para que nunca te fallen los cuidados adecuados:
1. Cuando hace calor, lo mejor es que no se recorte tanto el pasto, ya que los rayos solares podrían afectar a un césped muy corto, especialmente lo ponen un poco amarillo
2. Si notas que hay presencia de hongos, es mejor que vayas a tu tienda de confianza a comprar un fungicida para acabar con este problema y solucionar las manchas que aparecen
3. La poda constante hace al maestro, por lo que si quieres tu pasto no se seque, se sugiere que cuides de él sin dejarlo “pelón” o expuesto a los ataques
Otras recomendaciones para que tu pasto no se seque o se ponga amarillo es verificar el abono que le pones, pues uno con demasiado nitrógeno hace que cambie de color. Reparar las zonas dañadas y sembrar de nuevo es una alternativa muy inteligente.