Con el aumento de las temperaturas, es común que nuestra creatividad se funda y nos quedemos sin ideas para refrescarnos. Sin embargo, la mejor manera de combatir el calor es con una bebida o postre frío. Por eso, hoy te traemos una receta exclusiva para que aprendas a preparar un delicioso y refrescante raspado de piña colada. Este postre, típico de la playa, te hará sentir cerca del mar, aunque estés en el corazón de la Ciudad de México.
A diferencia de las bebidas alcohólicas de piña colada, nuestro raspado no contiene alcohol, sino que se compone de hielo triturado o raspado, el cual se adereza con jarabes de sabores, principalmente de piña y coco, creando así una especie de "nieve" o "granizado". Este se sirve en vasos o recipientes, y puede incluir o no trozos de fruta natural.
¿Cómo se preparan los raspados?
Para preparar un raspado, se utiliza una máquina especializada conocida como "raspadora" o "máquina de raspar hielo". En esta receta, los sabores de piña y coco son los protagonistas, ofreciendo una combinación perfecta para un postre helado que te dejará sin aliento y con ganas de compartirlo con amigos y familia.
Textura de un raspado
Es importante recordar que la textura del hielo raspado es similar a la nieve, lo cual lo hace suave y fácil de consumir. Los raspados se sirven típicamente en vasos o recipientes de plástico, acompañados de cucharas o palitos para que puedas mezclar y disfrutar de cada bocado.
Este verano, no dejes que el calor te detenga. Refréscate con un raspado de piña colada y disfruta de un momento de frescura y sabor sin igual. ¡Manos a la obra y a disfrutar de este delicioso postre helado!
Raspado de piña colada
Ingredientes
1 taza de piña congelada en trozos
1/2 taza de jugo de piña
1/4 taza de crema de coco
1/4 taza de ron blanco (opcional)
Preparación
Licúa la piña congelada, el jugo de piña, la crema de coco y el ron blanco (si lo usas) hasta obtener una mezcla suave.
Vierte la mezcla en una bandeja para hornear y congela durante al menos 2 horas.
Raspa la mezcla congelada con un tenedor o una cuchara para raspar hasta obtener la textura deseada.
Sirve inmediatamente y disfruta.