Con motivo del Día Internacional del Café el 1 de octubre, es importante explorar los efectos de esta popular bebida en nuestra salud. El café es conocido por ofrecer energía matutina y mantenernos activos a lo largo del día, ya sea caliente o frío, independientemente del clima.
Según Healthline, especialistas destacan que el café estimula el sistema nervioso central al promover la liberación de neurotransmisores como la noradrenalina, la dopamina y la serotonina. Esto no solo mejora la atención y reduce la fatiga, sino que también podría disminuir el riesgo de depresión y contribuir a una mayor longevidad.
Sin embargo, el consumo excesivo de café puede tener consecuencias negativas. La FDA recomienda que los adultos sanos limiten su ingesta a 4 o 5 tazas diarias (aproximadamente 400 miligramos) para evitar efectos adversos. Superar esta cantidad puede provocar adicción a la cafeína, aumentando la fatiga y la necesidad de consumir más.
Además, los médicos advierten que un consumo elevado de café puede incrementar el riesgo de enfermedades crónico-degenerativas, como artropatía y osteoartritis, afectando huesos y articulaciones. También se debe considerar el impacto del azúcar en el café, ya que un exceso puede contribuir a la obesidad y la diabetes.