El hair cycling es una técnica que busca equilibrar la salud del cabello y cuero cabelludo mediante el uso alternado de productos específicos. Inspirado en el skin cycling, este enfoque propone adaptar la rutina capilar a las necesidades del momento, optimizando la limpieza, hidratación y nutrición del pelo.
No hay una regla fija sobre la frecuencia del lavado, pero expertos como Quique Sánchez, director creativo de Espacio Q, y el estilista Borin, creador de LI:OH Products, coinciden en que alternar productos según el estado del cabello es clave para mantenerlo saludable. La técnica se basa en tres pasos fundamentales:
1. Desintoxicar y estimular
Es esencial realizar una limpieza profunda para eliminar residuos de productos, contaminación y grasa acumulada. Además, estimular la circulación sanguínea en el cuero cabelludo favorece la llegada de nutrientes a los folículos, promoviendo un crecimiento más fuerte. Los especialistas recomiendan este paso cada ocho o diez lavados para notar mejoras en brillo, vitalidad y reducción de la caída estacional.
2. Hidratar y humectar
Después de la limpieza profunda, el cabello necesita recuperar hidratación y elasticidad. Aplicar productos humectantes ayuda a mantener la suavidad y el equilibrio del cuero cabelludo, evitando sequedad o irritación.
3. Nutrir y proteger
En esta etapa, se incorporan nutrientes esenciales como proteínas, aminoácidos y vitaminas para fortalecer la fibra capilar desde la raíz hasta las puntas. Mascarillas, aceites y sprays con ingredientes naturales, como manteca de muru muru, aceite de avellana o extracto de semilla de frambuesa, aportan resistencia y protegen contra agresiones externas.
Un método para todos los tipos de cabello
Esta rutina es adaptable a cualquier tipo de melena, ya sea lisa, rizada, gruesa o fina. Además de mejorar la resistencia del cabello, ayuda a reducir la irritación y potenciar el brillo.
Según Sánchez, la clave está en ajustar los productos a factores como la estación del año o cambios en la caída capilar. Por ejemplo, en épocas de mayor caída, es recomendable incluir tratamientos fortalecedores, mientras que en verano conviene optar por fórmulas hidratantes que protejan del sol y el cloro.
El hair cycling es una estrategia efectiva para mejorar la salud capilar sin necesidad de rutinas complejas. Adaptar el cuidado del cabello a sus necesidades específicas garantiza una melena más fuerte, brillante y equilibrada.