Un nuevo proyecto, nuevas ambiciones y muchas expectativas. Los que nos hemos embarcado en la épica aventura del emprendimiento sabemos bien lo apasionante y duro que es cada momento desde el instante en el que comienzas a trabajar en tu criatura. Planes, ideas e ilusión a raudales que se entremezclan con las obligaciones burocráticas de toda nueva sociedad. Sin embargo, en muchísimas ocasiones tendemos a emplear una terminología poderosamente nociva para el día a día del negocio. Es posible que estés pensando en qué daño puede hacer una palabra para el desarrollo de un trabajo, y lo cierto es que no es necesariamente la semántica de estas palabras la que puede resultar perjudicial, sino el alcance de su contenido.
Te avanzamos un ejemplo: ¿cómo te sientes cuando alguien en el trabajo te pide algo 'ASAP'? El manido as soon as possible (Lo Antes Posible) llega cargado de dinamita y con toda seguridad nos tensionará. Un trabajo que hay que concluir cuanto antes no da margen para el respiro y por extensión, su calidad puede verse perjudicada. Sí, el ASAP forma parte de las palabras proscritas en el atrevido manual de productividad Rework que se ha convertido ya en un libro de mesilla y consulta obligada para nosotros. ¿Cuáles son estas palabras y por qué pueden ser perjudiciales? Estas palabras generan tensión en el equipo y cercenan el debate cuando este surge en algún trabajo. Vamos con ellas:
- "Necesito": Cuántas veces habremos escuchado el clásico "necesito que me entregues esto cuanto antes". Es tan habitual que ya nos hemos acostumbrado a ello, pero la realidad es que nunca necesitamos algo, sino que más bien nos gustaría que fuera de esa manera. Así las cosas, podríamos emplear un '¿qué te parece si...?' mucho más suave y que no ponga a la defensiva al interlocutor.
No podemos: Otra colectiva que forma parte habitual ya de la jerga en el trabajo. El 'no podemos' hacer tal o cual es un recurso fácil y de hecho no es sincero: ¿hay algo realmente que no podamos hacer en un trabajo o proyecto? La negativa suena en realidad a protesta cargada de sentimientos que te aseguramos nunca será bien recibida por el equipo.
Fácil: Es una palabra que raramente nos sienta bien, sobre todo cuando es algo que nos encomiendan. En realidad esta palabra es un arma arrojadiza puesto que nadie considera que su trabajo es 'fácil', pero sin embargo si ese mismo trabajo se encarga a un compañero de trabajo, la dificultad se diluye y se convierte en pan comido. Te puedes imaginar que ese 'fácil' va cargado con munición: si es fácil no debe llevar mucho tiempo en terminarse y hacerse además, bien.
- Sólo: Un recurso muy cercano al anterior y también llega cargado de veneno. El 'sólo' es utilizado nuevamente en terreno ajeno para endosar a algún incauto una tarea que nos está molestando y que es tan trivial desde nuestra perspectiva que no costará nada desempeñarla. "¡Si es sólo entregar el...!", pero claro, esa entrega equivale a que esa persona deje de hacer lo que está haciendo y se despiste con el regalito. Nuevamente se trata de un término muy pernicioso para el desarrollo del trabajo en equipo.
Y la quinta es el 'ASAP' que antes te hemos comentado. Puede resultar baladí, pero de la misma manera que escuchar estas palabras activa cargas negativas en nuestro cerebro y ánimo, su evitación consigue el efecto contrario: un ambiente mucho más fluido y distendido y con la posibilidad de que se produzcan malentendidos en su mínima expresión. Al final, el mensaje que se transmite es el mismo, pero el efecto en el receptor es completamente contrario.
Fuente: Hipertextual