La música es una herramienta que nos sirve para muchas cosas, puede ayudarnos a concentrarnos en el trabajo o mientras hacemos ejercicio. También, sirve para manejar nuestras emociones, refleja estados de ánimo.
Nuestros gustos musicales dicen mucho de nuestra personalidad, nos ayudan a conocernos mejor. No por nada existen listas de música en Spotify, las cuales, contienen canciones que pretenden ser el acompañamiento ideal para cualquier momento de la vida: depresión, desamor, alegría o simplemente para bailar.
La música tiene muchos efectos en nuestro cuerpo, y no sólo en el estado anímico, según un estudio de la Universidad de Pittsburgh, la música tiene la capacidad de sanar.
El experimento se realizó con pacientes que utilizaban un ventilador para respiración asistida de manera prolongada, el resultado señaló que aquellos que escuchaban música tuvieron una mejor evolución que aquellos que no la escuchaban. A los participantes se les permitió escoger la música de su agrado cada tercer día.
En los días en que se les permitía escuchar música, los pacientes mostraron una disminución de la frecuencia respiratoria, deterioro de la respiración y ansiedad. Los investigadores piensan que una intervención musical podría ayudar a los pacientes a respirar por sí mismos y de manera más rápida.
¿Qué tiene de terapéutico?
Un estudio reveló que, si bien sabemos que los gustos son variados, y a veces diferimos entre lo que nos hace felices o tristes, de manera subjetiva y psicológica, universalmente respondemos de la misma manera ente lo que nos emociona o nos calma.
Según el autor del estudio, Stephen McAdams, de McGill’s Schulich School of Music, la gente ha tratado de averiguar la manera en que cómo reaccionan a la música, basados en su influencia cultural y en algunas características universales de la música misma.
Y es que, al parecer, la música trasciende a otras experiencias sensoriales, y alcanza áreas sensoriales del cerebro relacionadas con la motivación, recompensas y emociones. El proceso de la música conecta los centros de emociones, lenguaje y memoria.
Malini Mohana, autora de un artículo relacionado con el tema, resalta que la música es esa terapia que le ayuda a calmar la ansiedad cuando, por ejemplo, se sube a un avión. Para ella, canciones como ‘Whole Lotta Shakin’ Goin’ On’ de Jerry Lewis, ‘Roll With The Changes’ de REO Speedwagon y ‘Tap Out’ de The Strokes tienen el efecto de calmarla durante cualquier vuelo.
Por medio de la música, Mohana encontró el medio para dominar su miedo y convertirlo en algo positivo. Por primera vez tuvo control de sus emociones.
Escuchar a The Strokes puede ser terapéutico.