Con esto en mente, busqué a algunos expertos para elaborar una lista de 8 hacks de vida fuera de lo común que podrían ayudar a tu balance mensual. Estos son pequeños ajustes y ninguno te hará rico, pero combinados pueden ahorrarte un dineral.
1. Pide billetes nuevos, y ya que estás en ello, pide de 500 y de 1000.
Se han realizado varias investigaciones acerca de cómo nuestro cerebro interactúa con el dinero, y dos de los estudios más recientes presentan resultados particularmente interesantes: al pagar en efectivo, los consumidores están más dispuestos a gastar billetes que lucen desgastados. Es más, los compradores también están más dispuestos a pagar con billetes de menor denominación. Es decir, a nuestros cerebros les resulta fácil deshacerse de un billete de 20, 50, 100 o 200 pesos, pero no tanto uno de 500 o de 1,000. Esto se debe a que los billetes más pequeños son el equivalente psicológico de una cuenta chica, y así el pago está mucho más justificado. Empata estos dos resultados y sólo retira billetes de alta denominación y que huelan a fresco.
2. Comprime tus datos para sacar más provecho de tu plan de teléfono celular.
Si pudieras reducir mágicamente la cantidad de datos que usas con tu smartphone sin reducir el uso que le das a tu teléfono, ¿cuán rápido te inscribirías? Simon Hill, un escritor en sitios de tecnología como Tech Radar y Android Authority, dice que eso es posible, y no es magia, sino una aplicación gratuita llamada Onavo. Funciona así: Onavo corre en segundo plano mientras navegas, tuiteas, subes videos a Vine, revisas tu correo electrónico y mucho más, y comprime los datos que cada tarea genera, lo que te permite hacer más con lo que tienes y te ayuda a evitar cargos por exceso de datos si no tienes un plan de datos ilimitado. También hace un monitoreo de la cantidad exacta de datos de cada aplicación consume, para que puedas ver si tu hábito de Twitter o la obsesión por revisar el correo electrónico te está dejando en la calle. Onavo está disponible para iPhone, iPad y Android.
3. Cuando busques un boleto de avión, borra tu historial de navegación.
Hay muchos mitos alrededor de la búsqueda del boleto de avión más barato, cada uno de mucho más específico que el anterior, tanto que no sería de extrañar que pronto alguien diga que 42 segundos después de las 10:37 am de todos los martes es el mejor momento para comprar tu vuelo, pero sólo si usas calcetines con lunares y acaricias tu cabeza mientras navegas en busca del precio más bajo.
Alexa Von Tobel, colaboradora de Forbes, fundadora de LearnVest y autora de Financially Fearless, tiene un tip simple para ayudarte en tu búsqueda: “Es algo básico, borrar la memoria caché cuando estés buscando un vuelo. De otra forma [las aerolíneas] notarán que estás buscando y te subirán los precios.” Y aunque Alexa no podría decirte exactamente cuánto podría ahorrarte limpiar tu historial, quien esto escribe vio una diferencia de precio de 50 dólares en el mismo día.
4. Programa tus compras. Todas.
Así como los pumpkin spice lattes tienen una temporada alta, también la tiene la mayoría de los bienes de consumo, y puedes ahorrar mucho dinero su programas tus compras en cada temporada.
“Quiero comprar una alfombra en este momento, pero si espero hasta después de la navidad, tendrá 50% de descuento”, dice von Tobel. “Los muebles y ropa de cama [son baratos] en enero, los abrigos, en marzo. Conoce las temporadas y entérate de qué momento es mejor para comprar cosas”, dice, señalando que ella creó un “calendario de compras” en su nuevo libro.
5. Averigua cuánto te cuesta el estilo de vida en casa.
“Vivir en un edificio con área de lavandería puede costarte mucho más que uno que no la tenga”, dice Zhou, y señaló que esto es especialmente cierto en las colonias más demandadas. Él agrega que también es bueno ser consciente de la ubicación en relación con el transporte. Si estás dispuesto a caminar un poco más lejos (o manejar más lejos), el alquiler puede variar dramáticamente.
6. Asegúrate de que su smartphone trabaje para ti.
Hill dice que tu teléfono puede hacer mucho más de lo que crees. Sí, ya lo usas como teléfono, navegador, servicio de correo electrónico, GPS, cámara y mucho más, pero es aún más potente. “Casi utilizo mi smartphone para todo. Creo que es el dispositivo definitivo”, dice, señalando que su smartphone puede funcionar como un afinador de instrumentos, un monitor de bebés, y un control remoto universal.
Después de descargar una aplicación gratuita como Dijit o RedEye, “sólo tienes que apuntar a tu televisión y lo configurará como un control remoto universal, y puede funcionar con tu códec de televisión satelital o de cable”, dice Hill.
7. Y cuando has dejado de usar tu smartphone, véndelo en el mercado secundario.
Si tu teléfono inteligente –o tu cámara, computadora portátil, tablet, computadora de escritorio o incluso una consola de juegos– está en buenas condiciones cuando has terminado de usarlo, recupera parte del costo del nuevo con la venta del anterior en el mercado secundario.
8. Acaba con los vampiros.
Los cargos vampiro, o cargos de goteo, son aquellos en los que pagas al mantener todos sus electrodomésticos y aparatos electrónicos conectados a la corriente mientras no los estás usando. Sí, has leído bien: incluso si la cafetera y tostadora y otros aparatos no están encendidos, aún así te cuestan dinero, dice Suzanne Jones, vicepresidenta de la Asociación de Profesionales de Servicios Energéticos, y añade que los mayores culpables de los cargos de vampiros son sus equipos electrónicos.
“La EPA estima que estos dispositivos –estoy hablando teléfonos celulares, iPads, consolas de juegos, etc.– consumen 100 millones de kilowatts por hora en ese poder vampiro”, dice Jones. “Eso se traduce en 10 mdd de desperdicio de energía por año.” |
Fuente: Forbes México