El hombre protagonista de esta hecho tan peculiar, se hartó porque no le habían pagado nada por el trabajo que hizo en dicho inmueble. Es por eso que sin pensarla dos veces, el hombre rentó maquinaria pesada y en lugar de utilizarla para construir, la usó para causar daños importantes en la fachada del lugar. Justo como lo leyeron, prefirió terminar con todo lo que hizo que esperar a que le pagaran.
Este sujeto se llevó balcones, ventanas y otras estructuras, incluyendo bodegas en las que se almacenaban tanques de gas, causando daños valuados en cerca de medio millón de dólares. Al terminar de “sacar su ira”, el protagonista de este caso tan peculiar subió a su coche y se fue del edificio. Y aquí es donde vienen el plot twist de la trama porque en lugar de escapar, se dirigió a la comisaría local para entregarse voluntariamente a las autoridades.
El sujeto se entregó, pero podría librar la cárcel
El hombre solamente dijo que estaba ahí para responsabilizarse por sus actos “de frustración”. Sin embargo, todo indica que las cosas son más complicadas de lo que parece ya que varios ingenieros están evaluando si la estructura del edificio se vio comprometida luego de los destrozos, por lo que no se descarta que el complejo tenga que ser demolido por completo, situación que por supuesto elevaría hasta el cielo el costo de los daños causados.
Por ahora, este sujeto enfrenta cargos por daños a propiedad privada, aunque podría salvarse de enfrentar a la justicia… sí, tal cual Resulta que el acusado asegura que el edificio aún le pertenece, pues hasta el momento no se le ha liquidado completamente la obra. De comprobarse esta versión, no habría delito que perseguir y por supuesto que libraría por completo pisar la cárcel. Así que al parecer, este sería un negocio redondo para él, ¿no creen?