Bomberos del condado de Mifflin en el centro de Pensilvania, en Estados Unidos recibieron una llamada inusual para atender una emergencia. Erin Meixel, madre de una pequeña de dos años realizó una llamada al 911 para pedir asistencia, ya que su hija había metido la cabeza en un molde para hornear pasteles.
De acuerdo con las declaraciones de Mexiel, la niña de dos años de nombre Quinnley, se encontraba jugando con el molde para pasteles cuando metió la cabeza y se quedó atrapada.
“Lo usó como un chal alrededor de sus hombros hasta que llegaron los bomberos. Era una soldado. Todavía podía comer y beber mientras tenía esta lata a su alrededor”, relató la madre a la televisora WGAL-TV.
De inmediato este caso se volvió tendencia en redes sociales, teniendo un desenlace favorable, gracias a que los bomberos del Junction Fire Company en Lewistown, atendieron la emergencia de manera oportuna, utilizaron tijeras de hojalatería para cortar el molde de cocina y así poder sacar la cabeza de la pequeña.
En las fotografías difundidas se puede ver como el molde se encuentra a en el cuello de la pequeña, como una especie de collar. Así como el resultado final, después de llevarse a cabo la labor de rescate al cortar el molde de cocina.