En un giro sin precedentes, durante una reunión en la plataforma de videoconferencias Zoom, un niño valiente llamado Íker rompió su silencio para denunciar un caso de supuesta agresión verbal y psicológica por parte de su profesora.

Por tres largos meses, Íker se encontró incapaz de estudiar, en una escuela que, según afirma, protegió a la profesora involucrada, permitiendo que continuara trabajando como si nada hubiera ocurrido. "Hoy se cumplen tres meses desde que mi acceso a la educación se vio interrumpido. Mi maestra, Gabriela Guzmán Medina, me agredió verbal y psicológicamente en más de una ocasión... y, sin embargo, el único que ha sufrido las consecuencias soy yo," denunció el menor.

El pequeño Íker relató su experiencia con la autoridad escolar, quienes, en lugar de apoyarlo, le "dieron la espalda y se burlaron" de sus derechos. La falta de medidas disciplinarias contra la profesora denunciada fue un tema de gran preocupación para Íker. "Mi agresora continúa feliz, a pesar de la existencia de protocolos que indican que una profesora violenta debería ser apartada de su cargo," lamentó el niño.

Haciendo un llamado al público, el joven valiente solicitó apoyo para continuar sus estudios y pidió que la escuela se convirtiera en un espacio seguro donde "no se permita que nadie ni nada le haga daño a un menor". Invitó a quienes sí pueden disfrutar de su experiencia escolar a que lo hagan por aquellos que, como él, no pueden.

En un conmovedor video compartido en la plataforma TikTok por el usuario @dailenofficial, Íker expresó su temor a las acciones de su docente y cuestionó la actuación de la Secretaría de Educación Pública (SEP) en casos como el suyo.