En lo que parece una escena de película cómica pero con graves consecuencias potenciales, dos jóvenes protagonizaron un peculiar accidente en el estacionamiento de Plaza Satélite, Estado de México. La causa: intentar evadir el pago del estacionamiento.

La Fugaz Huida en Redes Sociales

A través de un video viralizado en redes, se aprecia a un par de jóvenes, un hombre y una mujer, planeando seguir de cerca a otro vehículo con la esperanza de que la barrera del estacionamiento se levantara lo suficiente para permitirles salir sin haber pagado. Sin embargo, debido a la falta de habilidad del conductor, este plan resultó en un choque contra la pluma, generando revuelo en la zona.

El momento más sorprendente llega cuando un agente de seguridad, demostrando rapidez y destreza, interviene arrojando un objeto metálico al paso del vehículo, logrando que se detenga. Las palabras "No encuentro mi boleto. Deja te doy 100 pesos y me voy, güey" resuenan de fondo en el video, evidenciando el intento de los jóvenes por negociar su salida.

Wey además es plaza Satelite. La plaza con el estácionamiento más barato de toda la área metropolitana pic.twitter.com/CbTfrCnsmH

— Vegapunk (@Nehemiah_) September 7, 2023

Las Excusas y el Desenlace

Después del escándalo, la joven involucrada decidió compartir su versión de los hechos en TikTok. Contrario a lo que muchos podrían pensar, argumentó que su intención no era escapar sin pagar, sino que simplemente habían extraviado el boleto de estacionamiento. Y para sorpresa de muchos, admitió haber repetido la misma táctica en ocasiones anteriores con éxito.

Desafortunadamente para ellos, esta vez no salió como esperaban. El personal de seguridad los retuvo, y no solo tuvieron que pagar el costo del boleto extraviado, sino también el de otro cliente que se encontraba detrás de ellos y no podía salir debido al alboroto.

Reflexión Final

Este incidente, que podría haber tenido consecuencias más graves, sirve como recordatorio de que las decisiones impulsivas e irresponsables pueden llevar a situaciones inesperadas. Afortunadamente, en este caso, todo quedó en un susto y un pago extra, pero el mensaje está claro: la responsabilidad al volante es esencial, tanto para nuestra seguridad como para la de los demás.