Recientemente, un incidente peculiar ocurrió en un establecimiento de belleza, destacando cómo la música, en este caso el popular sencillo "Chupón" de Yeri Mua, puede influir en el comportamiento de las personas y desencadenar debates culturales.

Yeri Mua, una creadora de contenido que ha incursionado en la industria musical, ha visto cómo su canción "Chupón" alcanza más de 47 millones de reproducciones en Spotify. Su éxito no se limita a las listas de música; también ha conquistado TikTok, donde cientos de usuarios han integrado la canción en sus videos.

Sin embargo, este éxito no ha sido bien recibido por todos. Algunos "haters" han criticado abiertamente la letra de la canción, tildándola de vulgar y de doble sentido. Esta división de opiniones se vio reflejada en un incidente ocurrido en un salón de pestañas, que fue capturado y compartido en TikTok por @estephaniaorozco93.

El video revela cómo una clienta, insatisfecha con el servicio, se negó a pagar tras escuchar "Chupón" en el establecimiento. La situación escaló rápidamente, y la clienta, en medio de su enfado, lanzó comentarios homofóbicos y clasistas, asociando la elección musical del lugar con una supuesta falta de educación.

Esta situación abre un debate más amplio sobre cómo la música y la cultura pop pueden ser un reflejo de nuestras divisiones sociales y cómo, en ocasiones, las preferencias musicales se utilizan para hacer juicios de valor sobre las personas.

El incidente terminó con la clienta pagando solo una parte del servicio, tras la intervención del personal de seguridad. Además, amenazó con acciones legales, alegando que la obligación de pagar era ilegal, una afirmación que la tiktoker refutó rápidamente.

Este incidente nos deja mucho en qué pensar sobre el poder de la música en nuestra cultura. "Chupón" de Yeri Mua no es solo una canción popular, sino un espejo de las diferencias culturales y sociales que existen en nuestra sociedad. Como siempre, la música continúa siendo un poderoso medio que refleja y, a veces, desafía nuestras normas sociales.