Por supuesto que como punto principal, se debe siempre tener en cuenta que es necesario contar con los teléfonos de emergencias a la mano, de la Cruz Roja, de un hospital, de las ambulancias; también pensar en contar con un médico de cabecera, como antes se usaba, que era un médico general y ahora podemos tener uno internista o en el caso de tener niños, un pediatra, mientras que para los adultos mayores, un geriatra.
Demos disponer de todo lo siguiente y recordar que:
● Todo el material debe estar en un lugar seguro para evitar otro tipo de accidentes, los infantiles. El botiquín debe ser hermético, pero fácil de abrir.
● No es recomendable colocar el botiquín ni en el baño, ni en la cocina. Hay que tenerlo en ambientes que no sean ni demasiado húmedos ni demasiado secos.
● Cuando utilicemos algún material, es importante reponerlo.
● Comprobar periódicamente la fecha de caducidad de los productos.
Material de cura:
- Gasas estériles de varios tamaños
- Vendas
- Esparadrapos
- Tiritas
- Compresas
- Algodón
- Guantes estériles
Productos para desinfectar:
- Alcohol 70%
- Agua oxigenada
- Desinfectantes
Medicamentos:
- Analgésicos (paracetamol, ibuprofeno...)
- Sobres de suero oral
- Crema para la picadura de insectos
- Crema para las quemaduras
Otros materiales y productos:
- Suero fisiológico
- Tijeras
- Termómetro
- Pinzas
- Bastoncillos
- Linterna
También es necesario que cuando acudamos al médico y nos extienda las recetas de los medicamentos, se obtenga una copia, ya que ahora los antibióticos, requieren que se presente la receta en la farmacia y nos dejan muchas veces sin ella. También tomar en cuenta, que cuando se nos prescriben los antibióticos debemos ver por el tiempo que necesitamos tomarlo y no excedernos de lo que dice la receta. También checar, además de la duración del tratamiento, las cantidades exactas, es decir, la dosis de cada medicamento, incluyendo el homeopático, ya que exceder cualquier dosis, puede resultar peligroso.
Con nuestros queridos adultos mayores, se recomienda comprar un pastillero para toda la semana, e ir administrando los medicamentos con cada comida, tratando también de que otra persona sea la que supervise esta acción, porque es muy fácil que ellos puedan llegar a equivocarse. Si tienen una cuidadora o enfermera con ellos, será mucho más fácil al igual que si se encuentran viviendo en una residencia geriátrica.
También los invitamos el próximo 22 de septiembre, cuando festejaremos el día mundial del Alzheimer, con los talleres y ponencias en la casa Olga Tamayo del DIF, en cerrada de Tequesquitengo s/n, que iniciará a las ocho de la mañana y finalizará a las tres de la tarde, con un costo de $200.00.